Tal y como informó Reporte Índigo a principios de mayo, Pemex llegó a un acuerdo con el astillero español Hijos de J. Barreras para adquirir el 51 por ciento de sus acciones. Ayer se dio a conocer la firma del contrato entre la paraestatal y la empresa española que el año pasado sufrió serios problemas económicos.
A finales de noviembre del año pasado, Pemex había hecho un contrato para pedir la construcción de dos floteles a tal astillero. El flotel es una especie de instalación residencial para plataformas petroleras.
La industria naval en España ha resentido fuertemente la crisis económica en Europa, lo que ha provocado una reducción de pedidos y una situación laboral complicada.
La crisis de empleo ha tenido efectos particularmente graves en el noroeste de la nación, que está más dependiente de la demanda internacional.
En el 2012, el astillero español estuvo al borde de la liquidación, ante una serie de despidos y una reestructuración financiera con acreedores que aceptaron renunciar hasta el 80 por ciento de la deuda del astillero.
Ante la renegociación del contrato, y la inestabilidad financiera del astillero, Pemex decidió no solo comprar los floteles, sino adquirir el control del astillero gallego.
En un comunicado de la Bolsa Mexicana de Valores, se puntualizó que el objetivo que busca Pemex con esta negociación es transferir a mediano plazo el conocimiento tecnológico de HJB para el desarrollo de la capacidad constructura de buques especializados a la petroquímica en México.
Aportará capital
Por su parte, la empresa con base en Vigo indicó que la alianza con la paraestatal mexicana impulsará el fortalecimiento de la empresa gallega y de la industria naval española.
José García Costas, presidente de HJB, resaltó el beneficio en la productividad y desarrollo que otogará una unión con Pemex, que a su vez anunció su intención de aportar capital a HJB para modernizar y restructurar la situación financiera de la astillera.
En principio, se estima que se invertirá 10 millones de euros para estabilizar la necesidad de capital financiero del astillero.
Entre las exigencias que Pemex planteará a HJB es la necesidad de acelerar los procesos de renovación de la flota de barcos que utiliza la petrolera mexicana, con intención de aumentar la eficiencia en las operaciones de alta profundidad.