Viajar al extranjero, comprar una casa, estrenar auto, pagar las deudas o comenzar un posgrado, son algunos de los propósitos de año nuevo más populares, sin embargo, para cumplirlos se requiere más que buena fe, pues sobre todo necesitan de una estricta cultura de finanzas personales.
Algunas personas pasan por alto que para lograr sus propósitos de año nuevo, primero deben de mejorar la manera en que administran su dinero, pues de eso dependerá su éxito o fracaso en su intento por alcanzar finalmente sus metas.
Es por esta razón que la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) emitió una serie de recomendaciones para que las personas administren mejor su dinero y logren sus propósitos de año nuevo.
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Elabora un presupuesto
La piedra angular de unas finanzas sanas es un presupuesto. La manera de hacerlo es muy sencilla, anota tus ingresos y gastos mensuales para saber cuántos gastas en cada cosa.
Enfócate en pagar las deudas
Antes de emprender un nuevo proyecto, asegúrate de pagar tus deudas, siempre comienza por la de intereses más altos.
No compres por impulso
Evita comprar cosas que realmente no necesitas, antes de pagar pregúntate ‘¿qué pasaría si no compro este artículo?’, si la respuesta es ‘nada’, es casi seguro que no lo necesitas.
Compara precios
Que no te quemen los billetes, si vas a comprar algo, que se una compra bien pensada, investiga precios para asegurarte que estas adquiriendo ese producto al mejor precio posible.
¿Cuál es tu capacidad de endeudamiento?
Si no lo sabes, podrías estar en riesgo de endeudarte de más. Para conocer tu capacidad de endeudamiento resta a tus ingresos mensuales la cantidad que gastas al mes, el restante representa el margen que tienes para endeudarte y el cual no debes superar.
Usa con sabiduría el crédito
Los créditos pueden ser un infierno o una bendición, según la manera en que se usen. Recuerda principalmente que solo es dinero prestado y ser impuntual en los pagos sólo hará que la deuda se extienda más y más por los intereses.
Establece metas realistas
Quizá el año que viene no puedas comprar ese auto nuevo, pero si puedes sentar las bases para que en el siguiente cumplas esa meta. No olvides planear a largo plazo, eso incluye ahorrar e invertir el dinero.