Pinta su raya
Dentro de la lógica del libre comercio hace sentido que el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, advierta que México no aceptará la imposición de cuotas ni aranceles en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que podría arrancar en junio.
Así lo declaró a Reporte Indigo Valeria Moy, directora de “México, ¿cómo vamos?”, quien agregó que el concepto de libre comercio no sería aplicable una vez que se implementen cuotas y aranceles.
Lourdes Bautista
Dentro de la lógica del libre comercio hace sentido que el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, advierta que México no aceptará la imposición de cuotas ni aranceles en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que podría arrancar en junio.
Así lo declaró a Reporte Indigo Valeria Moy, directora de “México, ¿cómo vamos?”, quien agregó que el concepto de libre comercio no sería aplicable una vez que se implementen cuotas y aranceles.
De gira por Canadá, junto con el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray; Guajardo explicó que la imposición de cuotas y aranceles en el acuerdo trilateral sería desastroso.
Valeria Moy indicó que abrir una negociación es un asunto complicado y por eso habría que tener cuidado y estar listos para lo que se vaya a poner sobre la mesa.
Descartó que la renegociación del acuerdo comercial dure seis, meses, considerando que una de las partes no quiere negociar.
“Al abrirlo hay que tener mucho cuidado, al final del día estamos protegidos por la Organización Mundial del Comercio y no vamos a tener aranceles que serían menores en la OMC”, sostuvo.
Moy, quien es profesora en el ITAM manifestó que todavía no es claro lo que va a pedir Estados Unidos, por lo que resulta entendible la incertidumbre que genera la reapertura del tratado.
“Muchas veces, por irnos más rápido podemos cometer más errores. Creo que hay que ver qué es lo que quieren abrir”, expuso.
De acuerdo a cifras oficiales, el intercambio comercial entre México y EU supera los 500 mil millones de dólares al año. Pero, pese al alto nivel de integración, la dependencia mexicana respecto del mercado estadounidense es mucho más significativo. El 80 por ciento de las exportaciones de México se destinan hacia EU.
Sin embargo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha prometido renegociar o cancelar el TLCAN, porque, argumenta, éste ha quitado miles de empleos a los estadounidenses y ha beneficiado a México.
Con ello pretende reducir el déficit comercial que tiene con México, del orden de 63 mil millones de dólares, una cifra significativa pero inferior a la brecha que la economía estadounidense mantiene con China.
Ni un paso atrás
Al participar en el seminario “Nuevas estrategias para una nueva Norteamérica”, en la ciudad de Toronto, Ildefonso Guajardo afirmó que nada en el nuevo TLCAN debe ser un paso hacia atrás.
En ese sentido, descartó que se incluyan medidas que desvanezcan el comercio, como por ejemplo, cuotas o abrir la caja de pandora de los aranceles: “eso sería desastroso”.
Con respecto al déficit comercial que preocupa al presidente Trump, expuso que es posible trabajar para nivelarlo, aunque el trabajo debe orientarse a incrementar el comercio y no en reducirlo.
Lo que se quiere evitar es mandar señales de que la región de Norteamérica volverá a los años 70 y comenzará a usar instrumentos de la era proteccionista que no pertenecen a este siglo.
Añadió que México y Canadá no son parte del problema de manufactura en Estados Unidos, sino parte de la solución a conservar los empleos en Estados Unidos.