El mes pasado, General Motors (GM) llamó a revisión a 1.6 millones de automóviles por un problema relacionado con la ignición del motor. Esta falla técnica está ligada con al menos 13 muertes en Estados Unidos, cifra reconocida por la compañía.
Ayer, en medio de la controversia, la firma automotriz realizó un llamado adicional a 1.5 millones de vehículos.
General Motors se encuentra bajo investigación por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos, el Comité de Energía y Comercio del Congreso estadounidense, así como por la Administración Nacional de Seguridad y Tráfico de Autopistas (NHTSA por sus siglas en inglés).
Las autoridades y reguladores han cuestionado la razón por la cual le llevó a GM casi una década en ejecutar el llamado a revisión. La firma ha reconocido que sus ingenieros se percataron de la falla técnica en el 2004.
Esta edición del llamado a revisión contempla los siguientes modelos vehiculares: Chevrolet Express, GMC Savana, Cadillac XTS, Buick Enclave, GMC Acadia, Chevrolet Traverse y Saturn Outlook. Un vocero de la compañía mencionó que la mayoría de los vehículos se encuentran en Estados Unidos, sin embargo destacó que hay una cantidad significativa presente en Canadá y México.
CEO reacciona
Mary Barra, quién fue nombrada CEO de General Motors apenas el año pasado, ha ejercido un liderazgo activo en el caso de los llamados a revisión.
En un video publicado en el sitio de GM, Barra envió un mensaje a clientes, reguladores, trabajadores, autoridades y accionistas argumentando que la firma no está encarando el caso como un problema aislado, sino como parte de un proceso corporativo que les permita mejorar su respuesta frente a estas contingencias. La ejecutiva destacó: “Nuestro sistema para administrar y tomar decisiones respecto de los llamados a revisión va a cambiar debido a esto”.
En el video se anuncia la creación de la Vicepresidencia Global de Seguridad Vehicular, entidad abocada a la gestión técnica de la seguridad de todos los automóviles producidos por GM. Jeff Boyer, ingeniero con más de 40 años de experiencia, fue designado para el puesto.
GM estima que gastará más de 300 millones de dólares en gastos relativos a costos de reparación de los automóviles llamados a revisión.