Trump sopesa abandonar TLCAN

Ayer, un alto funcionario de la administración de Donald Trump dijo al portal Politico que se está preparando una orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). La información fue verificada por la agencia Reuters.

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Puntos porcentuales es el recorte al impuesto corporativo propuesto por la reforma tributaria de Trump, lo que ampliaría el déficit fiscal y por ende el déficit comercial, propiciando una posible renegociación más agresiva del TLCAN
“La llave del balance comercial y del nivel de largo plazo de los ingresos reales de Estados Unidos está en los cambios en la tasa de ahorro nacional. Culpar a otros no va a cambiar este hecho”
Martin FeldsteinPresidente del Consejo de asesores económicos de la administración de Ronald Reagan
El borrador de la orden ejecutiva fue desarrollado por Peter Navarro, director del Consejo Nacional de Comercio, y por Stephen Bannon, jefe de estrategia de la Casa Blanca
Esta semana, Ildefonso Guajardo, secretario de Economía de México, dijo que se espera que las negociaciones del TLCAN inicien a finales de agosto y concluyan en los seis meses subsecuentes
“El TLCAN ha sido muy, muy malo para nuestro país. Ha sido muy, muy malo para nuestras compañías y nuestros trabajadores, y por eso haremos grandes cambios o desecharemos el TLCAN de una vez por todas”
Donald TrumpPresidente de Estados Unidos, 18 de abril de 2017
“La lógica dicta que si no eres capaz de salir de una negociación es preferible no entrar en una”
Yanis VaroufakisEconomista griego

Ayer, un alto funcionario de la administración de Donald Trump dijo al portal Politico que se está preparando una orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). La información fue verificada por la agencia Reuters.

El borrador de la orden ejecutiva fue desarrollado por Peter Navarro, director del Consejo Nacional de Comercio, y por Stephen Bannon, el jefe de estrategia de la Casa Blanca.  Ambos personajes son asociados al ala más ideológica de la administración de Trump, que es afín a un enfoque de nacionalismo económico.

Sin embargo, esta medida aún no ha sido sometida a la consideración de otros miembros de la administración que son afines al status quo de libre comercio, como es el caso de Gary Cohn, el influyente ex presidente de Goldman Sachs que funge como director del Consejo Económico Nacional.

Esta semana, Ildefonso Guajardo, secretario de Economía de México, dijo que se espera que las negociaciones del TLCAN inicien a finales de agosto y concluyan en los seis meses subsecuentes. En ese sentido, hay voces que expresan que este movimiento de la administración de Trump es una táctica abocada a extraer mejores condiciones en la renegociación del tratado trilateral.

No obstante, el peso resintió el efecto mediático que generó la filtración. Después de que Politico publicó la noticia, el peso llegó a perder hasta 2.3 por ciento de su valor frente al dólar.

De acuerdo al funcionario de la Casa Blanca, quien pidió permanecer en condición de anonimato, el borrador de la orden ejecutiva podría ser revelado en las próximas semanas.

El 20 de abril, el presidente Trump dijo que su administración planeaba enviar los lineamientos de la renegociación del TLCAN al Congreso en las próximas dos semanas.

Poco antes, Trump había roto una larga tregua de silencio mediático hacia México al declarar que el TLCAN ha sido perjudicial para Estados Unidos, para sus empresas y para sus trabajadores: “Haremos grandes cambios o desecharemos al TLCAN de una vez por todas”.

La necesidad de una victoria

En Washington, existe el consenso de que la administración de Donald Trump está urgida de una victoria política de peso. Dos de las mayores promesas de campaña del presidente han sido neutralizadas.

Primero, el poder ejecutivo fue incapaz de promover su ley de seguridad social a través del Congreso. Los planes de la administración de Trump para “repeler y reemplazar el Obamacare” fueron obstaculizados por el espectro más conservador de la bancada del Partido Republicano en el poder legislativo.

Después, el presidente tuvo que dejar fuera del presupuesto la partida destinada para la construcción del muro fronterizo. Trump ha dicho que esperará hasta septiembre para incorporar el financiamiento de la obra de infraestructura estadounidense más onerosa en lo que va del siglo XXI.

En una entrevista que el secretario de Comercio, Wilbur Ross, ofreció al diario Financial Times, dejó claro que el TLCAN es la primera prioridad de su despacho y que el gobierno necesita “una victoria fácil”. Es probable que la vinculación de estos dos conceptos no sea mera coincidencia.

Paul Krugman advirtió recientemente en su columna para el diario The New York Times que todo presidente estadounidense que se encuentra en problemas suele acudir a la solución de las Malvinas,  es decir, a la solución de una guerra que desvíe la atención de los sucesos nacionales. En este caso, argumenta Krugman, la guerra podría ser económica.

Dada la asimetría de la relación bilateral con Estados Unidos, México es referido como un blanco fácil, un objetivo susceptible a mayores niveles de agresividad de parte de la administración de Trump.

Ignorancia explosiva

Martin Feldstein, profesor emérito de economía de la Universidad de Harvard y presidente del Consejo de Asesores Económicos de la administración de Ronald Reagan, se sumó a las críticas realizadas por Jeffrey Sachs, profesor de economía de la Universidad de Columbia.

Ambos sostienen que el presidente estadounidense y su equipo cercano parecen no entender las causas del déficit comercial de Estados Unidos, una de las obsesiones más evidentes de la política económica de la administración de Trump.

Trump, Ross y Navarro han señalado en reiteradas ocasiones que la renegociación de los tratados comerciales vigentes de Estados Unidos, particularmente del TLCAN, tienen el objetivo expreso de reducir el déficit comercial estadounidense.

Estados Unidos mantiene un déficit comercial con México de unos 60 mil millones de dólares al año.

Sin embargo, Feldstein y Sachs argumentan que el balance comercial de Estados Unidos únicamente podrá ser corregido con un aumento en el  nivel de ahorro nacional. Después de todo, dicen, el déficit comercial deriva de la identidad estadística de ahorro nacional menos inversión doméstica.

El consenso de analistas considera que la reforma fiscal que Trump enviará próximamente al Congreso, vendida  por sus promotores como “el mayor recorte impositivo en la historia”, mermará el nivel de ahorro nacional y agravará el déficit comercial.

De tal suerte, Sachs advierte que el analfabetismo económico podría ocasionar una guerra comercial.

Paul Krugman no está completamente de acuerdo. A su manera de ver las cosas, no es el analfabetismo económico lo que provocará una guerra comercial, sino los decrecientes índices de aprobación del presidente Trump.

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