Un nuevo aliado para Argentina
Consentidos chinos
En momentos de dificultades económicas, China lanza un salvavidas a Argentina.
Dentro de su visita al continente la semana pasada, el presidente chino Xi-Jinping firmó 20 convenios bilaterales de inversión.
El acto es una bocanada de aire fresco para los argentinos, que en lo últimos meses han sufrido un gran revés en su lucha jurídica en contra de los llamados fondos buitres.
Entre los acuerdos concretados destaca un intercambio de divisas, o crédito swap, por un valor de 11 mil millones de dólares.
Alejandro DabdoubConsentidos chinos
En momentos de dificultades económicas, China lanza un salvavidas a Argentina.
Dentro de su visita al continente la semana pasada, el presidente chino Xi-Jinping firmó 20 convenios bilaterales de inversión.
El acto es una bocanada de aire fresco para los argentinos, que en lo últimos meses han sufrido un gran revés en su lucha jurídica en contra de los llamados fondos buitres.
Entre los acuerdos concretados destaca un intercambio de divisas, o crédito swap, por un valor de 11 mil millones de dólares.
Este dinero promete revitalizar al banco central, que en los últimos tres años ha tenido que reducir sus reservas a la mitad sitúandolas hoy en día alrededor de los 30 mil millones de dólares.
“Firmamos un convenio entre los dos bancos centrales para un pase financiero por 11 mil millones de dólares para lograr estabilidad en los tipos de cambios”, dijo la mandataria Cristina Fernández de Kirchner.
“Justamente en momentos en que sufrimos ataques especulativos de sectores que hacen oscilar las monedas y vuelven al mundo inestable en materia financiera”.
El resto de las inversiones apoyadas por empresarios chinos serán utilizadas para financiar proyectos de infraestructura.
Entre estos últimos destaca la construcción de dos represas hidroeléctricas y la compra de nuevas vías, locomotoras y vagones en la línea de ferrocarril Belgrano Cargas.
Ante la complicada situación con Estados Unidos, Argentina continúa abriendo nuevos horizontes económicos.
Amenazados por buitres
Después de años batallando por reestructurar la deuda argetina, la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos eliminó la posibilidad de que la nación latinoamerica continuara aplazando sus pasivos.
El problema data desde el 2001, cuando Argentina se declaró en bancarrota y se vio forzada a reestructurar su deuda.
Sus negociaciones fueron calificadas como muy severas y perjudiciales para los acreedores; sin embargo, consiguió que el 92 por ciento de los tenedores de bonos aceptaran sus condiciones.
El 8 por ciento restante demanda, hasta la fecha, el pago completo de la deuda, más los intereses y cargos generados por no pagar a tiempo, sin que Argentina ceda en su postura.
Debido a que los bonos fueron suscritos en el mercado de Nueva York, le corresponde a las cortes de Estados Unidos resolver la pelea entre los acreedores privados y el gobierno argentino.
Durante años se pagó a la mayoría de los tenedores de bonos las cantidades acordadas en la reestructuración.
Pero la Suprema Corte resolvió que no es posible seguir con dicho esquema si no se liquida antes a los acreedores que rechazaron la oferta de Argentina.
La próxima semana vence el plazo para hacer los pagos de estos llamados fondos buitres. Si el gobierno de Fernández de Kirchner no consigue llegar a una acuerdo antes, el país caería de nuevo en default, o suspensión de pagos.
“No podemos estar de nuevo en una situación donde, por pagar la deuda, reine el hambre”, afirmó el ministro de economía de Argentina, Axel Kicillof, ante la resolución de la corte de EU.