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Una industria de altos vuelos

En los últimos años, en México ha despegado la industria aeroespacial, de tal grado que ya se está posicionando entre los grandes a nivel mundial, y tal parece que dicha tendencia va para largo. 

Cabe destacar que esta, como la industria automotriz, se está volviendo de lo más competitiva internacionalmente no por sus bajos costos en la mano de obra, sino por su calidad, tratados económicos internacionales y demás condiciones positivas.

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Estados de la república tienen ya operaciones del sector
Al ser admitido en el Arreglo de Wassenaar, México obtiene un potencial de exportación de bienes aeroespaciales valuado en 10 mil millones de dólares
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En los últimos años, en México ha despegado la industria aeroespacial, de tal grado que ya se está posicionando entre los grandes a nivel mundial, y tal parece que dicha tendencia va para largo. 

Cabe destacar que esta, como la industria automotriz, se está volviendo de lo más competitiva internacionalmente no por sus bajos costos en la mano de obra, sino por su calidad, tratados económicos internacionales y demás condiciones positivas.

Dicha industria comprende los procesos productivos de aeronaves, vehículos aéreos no tripulados, helicópteros o los principales componentes para todos estos.

Estudios del Oxford Business Group, firma de inteligencia financiera, revelan que el sector aeroespacial mexicanos lleva aproximadamente una década creciendo a una tasa anual cercana al 20 por ciento. 

De esta forma México se volvió en el mayor receptor de Inversión Extranjera Directa en la industria aeroespacial entre el 2009 y 2012. Y es que tan solo en el mismo periodo, las exportaciones aeroespacial pasaron de 2.5 a 5.4 mil millones de dólares.

Dicho sector se ha posicionado fuertemente en estados del norte como Nuevo León, Sonora, Chihuahua y Baja California, donde en este último se concentra la mayor parte de la industria en el país con más de 59 empresas instaladas. 

Sin embargo, son 18 estados de la república donde se encuentran instalaciones tanto de manufactura como de investigación aeroespacial, siendo Querétaro uno de los que ha mostrado un mayor crecimiento en los últimos años.

Empresas como la francesa Latécoère ha dado fé de las ventajas comparativas que han demostrado los mexicanos, al trasladar sus operaciones de Túnez hacia el estado de Sonora en el 2012. 

Cabe mencionar que dicha ventaja comparativa no son los bajos salarios, como se encuentra en otros sectores mexicanos, sino en la calidad del capital humano de los más de 34 mil empleados que laboran actualmente en compañías aeroespaciales.

Por el papel que está tomando México en el sector a nivel mundial, se le ha admitido como miembro de pleno derecho al Arreglo de Wassenaar para el Control de Exportaciones de Armas Convencionales, Bienes y Tecnologías de Uso Dual. 

Con esto se obtiene un potencial de exportación de bienes aeroespaciales de alto valor agregado valuado en 10 mil millones de dólares, de acuerdo con informes de ProMéxico.

La firma de inteligencia financiera antes mencionada establece que entre las principales razones por las que el sector está creciendo de tal forma se encuentran la creación de universidades especializadas y los acuerdos económicos que sostiene el país con gran parte del mundo, tal como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Este último punto es importante debido a que con dicho acuerdo la industria en cuestión pudo desarrollarse en gran medida. 

Cabe destacar que tan solo el 9 por ciento de las materias primas requeridas para la industria son producidas en México, por lo que lo demás se debe de importar. 

Sin embargo, con la reducción de aranceles, gracias a la gama de acuerdos internacionales con los que goza México, se ha podido seguir importando materia prima y ser competitivo a nivel mundial en dicha industria.

De igual forma, Estados Unidos, siendo uno de los principales demandantes de la industria, representa el principal destino de las exportaciones mexicanas del sector con el 87 por ciento de estas.

Por lo que se puede decir que el TLCAN es una de las principales razones del auge que está teniendo la industria en nuestro país.

Aunado a ello, el nacimiento de organismos como Pro Aéreo, que junto con instituciones gubernamentales está realizando promoción del país en el extranjero como destino de inversión del sector en cuestión.

Desarrollan capital humano

En el 2005, la empresa canadiense Bombardier Aerospace, fabricante líder a nivel mundial de aeronaves, se estableció en Querétaro tras una contienda internacional para instalar sus operaciones, con la condición de que se construyera una universidad especializada en la materia. 

Por lo que en el 2007 nace la Universidad Aeronáutica de Querétaro (UNAQ) con el objetivo de volver al estado más atractivo a la inversión y cubrir así la actual demanda de especialistas de dicha área. 

Actualmente, los más de mil 800 trabajadores graduados de la firma canadiense provienen de la UNAQ, pues esta empresa apoyó a la creación del plan de estudios.

Por su parte, Baja California ha tomado el ejemplo de Querétaro al abrir el Centro Aeroespacial de Desarrollo Técnico Especializado (CADTE), y en colaboración con el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) están logrando crear personal calificado para este tipo de sectores.

Futuro en las alturas

Pronósticos de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (FEMIA), en colaboración con la Secretaría de Economía, consideran que esta industria en México seguirá creciendo en aspectos de número de empresas instaladas, empleos creados e IED para el 2020. 

Según la FEMIA, en México estarán instaladas 450 empresas dedicadas al sector aeroespacial, de las 270 que se encuentran en la actualidad. 

Respecto a IED, se espera que ingrese más de tres veces lo que actualmente se hace. De los 34 mil empleos que se ofrecen en este rubro, se espera que la oferta laboral sea de 110 mil empleos, de los cuales entre el 30 y 35 por ciento serán puestos de ingeniería. 

De igual forma, se estima que las exportaciones aeroespaciales mexicanas alcancen los 7 mil millones de adólares, las cuales llegarán a involucrar toda la cadena productiva, desde diseño hasta manufactura, esto último de acuerdo con Francisco González Díaz, director general de ProMéxico. 

Por todo ello, en los mejores escenarios se espera que en el futuro próximo México ocupe el lugar número 10 en la clasificación internacional de la industria, superando así a países como Brasil y España.