Yahoo “nunca perdió la oportunidad de perder una oportunidad”. El acuerdo de adquisición por parte de Verizon, un gigante de telecomunicaciones con un valor de mercado de 230 mil millones de dólares, marca el final de dos décadas de auge y caída de una de las primeras y más grandes promesas de Silicon Valley.
La compañía, fundada en 1994 por dos estudiantes de ingeniería de la Universidad de Stanford, anunció su venta al mayor operador de telecomunicaciones móviles en Estados Unidos por 4.83 mil millones de dólares.
Aunque el acuerdo es significativo y concluye una fuerte campaña de presión de parte de inversores activistas en el consejo de administración de Yahoo para vender la compañía, esto representa apenas una fracción de valuaciones y opciones de compra pasadas.
En el año 2000, en pleno auge de la industria de tecnologías de la información, Yahoo presentaba un valor de mercado de 125 mil millones de dólares. Un año después, cuando reventó la burbuja de las dotcom, la firma llegó a perder el 93 por ciento de su valor de mercado.
Sin embargo, la compañía se reestructuró y en el 2008, Microsoft le realizó una oferta de adquisición de 44.6 mil millones de dólares. La gerencia de Yahoo rechazó el acuerdo porque consideraba que se estaba subvaluando a la compañía.
La debacle de Yahoo, en la que desfilaron seis directores generales en menos de 20 años, derivó de dos aspectos que marcaron las decisiones estratégicas de la compañía: la falta de identidad que se reflejó en la falta de una estrategia de negocios clara, y el hecho de que no se capitalizaron tendencias de la industria que hoy son responsables del éxito de sus competidores, como el auge de las plataformas móviles, el crecimiento de las redes sociales y la relevancia de las tecnologías de búsqueda.
Promesa incumplida
El contraste de la venta de Yahoo con las valuaciones actuales de otras promesas de Silicon Valley que se desarrollaron después, como Google y Facebook, salta a la vista.
En el 2002, la gerencia de Yahoo ofreció pagar alrededor de 3 mil millones de dólares para adquirir Google. El acuerdo fue rechazado. Hoy Alphabet, la compañía matriz de Google, tiene un valor de capitalización de mercado de 510 mil millones de dólares. Asimismo, Yahoo intentó comprar Facebook por mil millones de dólares en el 2006. Las negociaciones no prosperaron y hoy la red social tiene un valor que supera los 347 mil millones de dólares.
Andrew Braccia, socio general de la firma de capital de riesgo Accel y antiguo director de búsquedas en Yahoo, dijo al diario The Wall Street Journal que lo que le está pasando a Yahoo no es producto de las decisiones tomadas en los últimos tres años, sino de las decisiones que se hicieron hace 10 años.
Para cada director general que sustituía al anterior, la pregunta más relevante que se hacía al inicio de su gestión era “¿Qué es Yahoo?”. La falta de enfoque se tradujo en una incertidumbre estratégica. La firma no tenía claro si era una compañía de medios de comunicación y generación de contenido o una empresa tecnológica.
Marissa Mayer, la actual directora general de Yahoo, intentó resolver este problema de identidad. La estrategia de Mayer, orientada hacia el lado tecnológico de la compañía, se basó en la adquisición de start-ups tecnológicos. Bajo su gestión, Yahoo gastó 2 mil millones de dólares en la compra de empresas con potencial de crecimiento, incluyendo el pago de 1.1 mil millones de dólares por el portal Tumblr.
No obstante, los decepcionantes resultados financieros de la compañía exasperaron a los inversionistas, particularmente a los tenedores externos que fueron ganando influencia en el consejo de administración. Los últimos resultados trimestrales de Yahoo registran una caída anualizada de los ingresos de alrededor de 20 por ciento.
Starboard Value, la firma detrás de los inversores activistas de Yahoo, presionó a la gerencia para evaluar opciones estratégicas. Esto derivó en la exploración de socios potenciales para venderles el negocio central de la compañía, el cual excluye activos valuados en más de 40 mil millones de dólares que incluyen patentes y participaciones en Yahoo Japón y en Alibaba.
Mayer ha expresado su intención de permanecer en la compañía para consolidar la transición de la venta y explotar el valor del resto de los activos de la firma: “Planeo quedarme, me encanta Yahoo”, dijo en una llamada con analistas e inversionistas. El paquete de compensación de Mayer ronda los 50 millones de dólares en efectivo y opciones de acciones.
El interés de Verizon
La lógica detrás de la adquisición de Yahoo responde a una línea estratégica de Verizon que busca alcanzar 2 mil millones de usuarios y 20 mil millones de dólares en ingresos para el 2020.
El interés de la firma de telecomunicaciones por Yahoo se basa en su capacidad para generar contenido, así como en sus mil millones de usuarios activos mensuales. La compra de la firma tecnológica ocurre un año después de que Verizon adquiriera a AOL, una compañía con características similares a Yahoo, por 4.4 mil millones de dólares.