Anderson Cooper, reportero estrella de CNN fungió como réferi del primer intercambio público entre los cinco pre candidatos demócratas a la presidencia de Estados Unidos.
Más de 15 millones de espectadores convirtieron al evento en el debate demócrata más visto en la historia de EU y permitió que millones de estadounidenses pudieran observar un enfrentamiento sin precedentes, entre el capitalismo y el socialismo.
Preliminares
Jim Webb, Martin O’Malley y Lincoln Chafee, los otros tres pre candidatos ofrecieron una pelea poco interesante.
Chafee, un ex republicano; Webb, un veterano de la guerra de Vietnam y ex secretario de la armada durante el gobierno de Ronald Reagan; y O’Malley, el discreto gobernador de Maryland; sirvieron solo como aperitivo para el evento principal. Los tres candidatos están lejos en las encuestas y no tienen posibilidades reales de hacerse con la candidatura.
El perdedor de la noche fue Joe Biden, vicepresidente de EU y pre candidato no oficial. Es probable que la actuación de Clinton devuelva la confianza al ‘mainstream’ demócrata y esto deje fuera de la contienda a Biden, quien todavía no ha confirmado sus aspiraciones al título.
Clinton vs Sanders
Hace más de un mes Reporte Indigo adelantó que Sanders – un senador de 74 años que se autonombra socialista – sería la amenaza más importante para Clinton en las primarias, quien perdía terreno en las encuestas.
Desde entonces Hillary ha tratado de recuperar la forma y conectar con un electorado que la percibe distante y poco sincera.
Los especialistas todavía descartan una posible victoria del caballo negro, pero la contienda principal ya está definida. El candidato demócrata a la presidencia será el senador por Vermont o la ex primera dama.
La ex Secretaria de Estado comenzó el debate acartonada. Sanders comenzó sorprendiendo con un discurso frontal y sin tapujos.
El senador arremetió contra los excesos de los oligarcas capitalistas. Sanders dijo que la clase media de EU lleva 40 años de caída libre y según él, ahora la gente trabaja mucho más, recibe menos y cada día hay más pobres.
Sin dejar tiempo para una respuesta de Clinton, Sanders aseguró que el sistema electoral estadounidense está corrompido y esto le permite a los millonarios poner en la Casa Blanca al candidato que más les acomode.
El senador pidió que esos recursos se utilicen para invertir en la creación de empleos y en mejorar la educación. De esta manera Sanders cree que EU puede dejar de ser el país con más presos en sus cárceles.
Durante todo el debate, Bernie Sanders mantuvo firme su convicción de luchar contra el cambio climático, el cual considera el reto más importante para EU y para el mundo.
Después del inicio titubeante, Clinton recordó su experiencia en la política e hizo pesar su calidad de favorita. La ex canciller no se equivocó y mantuvo un lenguaje firme y cuidado.
Estuvo de acuerdo con Sanders en algunos momentos, pero se desmarcó del socialista y dijo que en la presidencia de EU no se pueden tomar decisiones impulsivas.
Clinton criticó las posturas de Sanders a las que considera poco realistas. Ella también apoya el cambio climático, la educación y el alza del salario mínimo.
Para la ex primera dama, la diferencia entre ella y Sanders es su pragmatismo. Ella lidia con posibilidades reales y no con utopías. Ella sabe correr riesgos balanceados y hacer compromisos para lograr metas tangibles.
“Yo estoy justo a la mitad y las cosas vienen hacia mí de diferentes direcciones”, dijo la pre candidata.
Clinton quedó bien parada al ventilar un tema donde la postura de Bernie Sanders es controversial.
Bernie pudo defender su posición con eficiencia cuando lo atacaron por haberse rehusado a pelear en Vietnam, pero cuando recordaron que votó en contra de controles más estrictos para la portación de armas, se vio arrinconado.
El veredicto
Bernie Sanders ha demostrado ser un contendiente a la altura de Clinton y ha logrado algo que no se esperaba: revivir al socialismo en el país que más ha luchado por erradicarlo del mundo.
Sanders es un Rocky, un semental judío que aguantará hasta el final de la batalla. Sus esfuerzos lo acercarán a la victoria. No obstante, la favorita para ganar sigue siendo Clinton.
Los votantes han visto que el optimismo socialista tiene límites en un país que normalmente no marcha en sincronía con la ideas más progresistas.
En los tiempos de Abraham Lincoln, -cuando se abolió la esclavitud- aquellos que aseguraban que además había que darle el privilegio del voto a los afroamericanos y también a las mujeres fueron tachados de radicales y utopistas.
El idealismo de Sanders ha sido una buena medicina contra las ideas anacrónicas y extremistas de los candidatos republicanos, pero todo parece indicar que los demócratas elegirán a alguien más realista, a Hillary Clinton.
Algunos, por supuesto, verán que el cambio que se necesita en EU es más profundo. Esos ‘radicales’ le darán su voto a Sanders, pero por lo visto, en este primer episodio, eso todavía no es suficiente para noquear a Clinton.
Los 5 mejores momentos del primer round
> Bernie confunde con un gesto amistoso
“Voy a decir algo que tal vez no sea muy bueno en términos de política, pero la Secretaria (Clinton) tiene razón. Los estadounidenses están enfermos y cansados de escuchar sobre sus malditos emails”
> Derechazo de Clinton al izquierdismo de Sanders
“Sí, nuestro trabajo es frenar los excesos del capitalismo para que no se salga de control y no cause las injusticias que estamos viendo en nuestro sistema económico, pero no somos Dinamarca. Somos los Estados Unidos de América”
> Bernie esquiva un golpe capitalista
“¿Soy parte del capitalismo de casino de Wall Street? No, yo creo en una sociedad donde a toda la gente le vaya bien. No solo a un manojo de millonarios”
> Hillary tira un gancho al hígado de Sanders
“¿Sanders es suficientemente fuerte con respecto al control de armas? No, no lo creo, para nada”
> Bernie manda a la lona a la favorita
“La invasión a Irak ha sido la decisión más errada de la política exterior en la historia de los Estados Unidos”