El dueño del inmueble ha sido arrestado y se espera que sea acusado de construcción ilegal y de obligar a los empleados a acudir a trabajar pese a los riesgos
La cifra de muertos del derrumbamiento de un edificio con fábricas textiles en Bangladesh el pasado lunes 29 de abril era de 300 muertos. Sin embargo, ayer se supo que, en total, más de 500 cadáveres (501) han sido recuperados de lentre los escombros.
Esto según dijeron las autoridades tras arrestar por negligencia al ingeniero Abdur Razzak Khan, que advirtió que el inmueble no era seguro pero que es acusado de ayudar a su propietario a agregar tres pisos de manera ilegal.
De acuerdo a la prensa local, Mohammed Sohel Rana, el dueño, llamó a Khan para que inspeccionara el edificio el 23 de abril después de que surgieron grietas. Esa noche Khan apareció en televisión diciendo que tras su inspección dijo a Rana que desalojara el edificio porque no era seguro.
Khan, un ingeniero de la Universidad de Jahangirnagar, cerca de Savar, dijo que llamó la atención de ingenieros del gobierno para que examinaran en profundidad el edificio.
La policía ordenó el desalojo del inmueble, pero testigos señalaron que Rana dijo a la gente que se reunió a la mañana siguiente en la entrada que este era seguro y que los gerentes de las fábricas de prendas de vestir querían que sus trabajadores entraran a laborar. El edificio colapsó horas después.
Mohammad Refatullah, alcalde electo de la municipalidad de Savar, fue suspendido por presunta negligencia al aprobar el diseño y el croquis del edificio, dijo Abu Alam, un funcionario de alto rango del ministerio de gobierno local.
La cifra oficial de desaparecidos es de 149, aunque los cálculos no oficiales son mayores. Rana también fue arrestado y se espera que sea acusado de negligencia, construcción ilegal y de obligar a los empleados a acudir a trabajar pese a los riesgos, cargos que son castigados con un máximo de siete años en prisión.
La Corte Suprema de Bangladesh ordenó al gobierno confiscar la propiedad de Rana y congelar los activos de los propietarios de las fábricas allí ubicadas para que el dinero pueda utilizarse para pagar el salario de los trabajadores. (Fuente: AP)