Alberto Fernández considero el combate a la pobreza, el diseño de un nuevo contrato social y la economía, como sus principales retos al asumir este martes como nuevo presidente de Argentina.
“Los vengo a convocar sin distinciones a poner la Argentina de pie, paso tras paso con dignidad, […] recuperar un conjunto de parámetros económicos que hoy no tenemos”, expresó ante el Congreso.
Acompañado por el saliente mandatario Mauricio Macri, la entrante vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y su pareja Marcela Luchetti, el nuevo presidente informó que sus políticas públicas serán diseñadas entre todas las fuerzas políticas, académicos, técnicos y profesionales argentinas.
“Quiero ser el presidente que encuentre la mejor faceta de quienes piensan distinto de mí, ser capaz de corregir mis errores en lugar de situarme en el recinto de iluminado”, agregó.
Diagnosticó que más de 15 millones de personas sufren de inseguridad alimentaria a pesar de que Argentina es uno de los países más productores y que “sin pan no hay vida ni futuro, sin pan no hay democracia”.
Anunció que presentará el plan integral contra el hambre para poner fin a “este presente penoso” donde “los relegados, sean parte y comensales de la misma mesa de una nación”.
A su juicio, la economía heredada de Macri asfixia a las familias con créditos a tasas elevadas por lo que se requiere un Estado que brinde préstamos a menores tasas.
— Alberto Fernández (@alferdez) December 10, 2019