El nuevo presidente de Argentina Alberto Fernández toma posesión hoy martes 10 de diciembre. Su llegada implica el regreso del peronismo al gobierno y el primer problema que enfrentará es la crisis económica del país, pero ya tiene una estrategia y mucho apoyo.
Fernández es abogado por la Universidad de Buenos Aires y docente universitario. Fue subdirector general de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Economía durante el gobierno del presidente Raúl Alfonsín en 1985.
También fue titular del organismo regulador del mercado de seguros en Argentina durante el gobierno del peronista Carlos Menem entre 1989 y 1995 y vicepresidente de empresas del Banco de la Provincia de Buenos Aires entre 1997 y 2000.
Con estos antecedentes bajo el brazo, el mandatario electo está interesado en recuperar la economía del país. Fernández informó sobre las primeras medidas de su mandato sobre este tema desde el viernes pasado cuando presentó a su gabinete y las superestructuras en las que consistirá su gobierno.
Fernández fue vicepresidente de las empresas del Banco de Buenos Aires
El presidente electo mencionó un aumento de emergencia para jubilados, personas que reciben salarios más bajos y empleados públicos. El mandatario agregó que el gobierno entrante tiene la responsabilidad de resolver el problema de los que menos ganan y deben hacer frente a la inflación.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que en septiembre el índice de precios al consumidor creció un 5.9 por ciento con lo cual la inflación acumulada en los últimos 12 meses es del 53.5 por ciento.
“Vamos a recibir un país con casi 41 por ciento de pobreza. Uno intenta buscar bases sólidas y cuesta encontrarlas. Lo que sí es sólido es el compromiso nuestro para que los pobres de Argentina sean nuestro primer centro de atención”, dijo el mandatario.
El número de pobres en el país sudamericano representa el 40.8 por ciento de la población total, de acuerdo con los estudios de la Universidad Católica Argentina. De ellos, un 8.9 por ciento son indigentes. Además, 59.5 por ciento de los niños y adolescentes se encuentran bajo la línea de la pobreza.
Ante este nivel de emergencia otra de las medidas es un proyecto de ley para crear el Consejo Económico y Social. Alberto Fernández explicó que el objetivo de este organismo es lograr acuerdos sobre precios y salarios.
También pretende evitar el desgaste del Ministerio de Trabajo y otros ministros al momento de tener que resolver un problema.
En su discurso del viernes pasado, el presidente electo también dijo que podría revisar la ola de aumentos de precios que se dieron en los rubros de alimentos y medicamentos.
“Hubo sectores que han desatado aumentos en los precios indiscriminadamente. Tenemos todo estudiado”, aseguró Fernández.
Fernández adelantó desde el viernes que enviará de inmediato al Congreso un proyecto de ley para conformar el Consejo. La idea es que esta institución perdure hasta otros gobiernos y que su presidente cuente con el acuerdo del Senado.
Al igual que el sistema de Países Bajos, este organismo estará conformado por referentes sindicales, empresarios, movimientos sociales, académicos, representantes del Congreso y del Poder Ejecutivo.
El equipo de Alberto Fernández para enfrentar la crisis
Alberto Fernández cuenta con un equipo de especialistas para atender la crisis económica. Durante la presentación del resto del gabinete, Martín Guzmán fue nombrado como el ministro de Economía. Se trata de un académico de 37 años instalado desde hace años en Nueva York.
Se graduó como licenciado en Economía en su provincia para continuar sus estudios en Estados Unidos, país donde desarrolló su carrera académica y vivió en los últimos años.
“Es una gran alegría que Martín haya aceptado dejar Nueva York y venir a Buenos Aires para hacerse cargo de la economía argentina. Deposito una enorme confianza en él, es un hombre joven, muy preparado. Llevamos varias semanas trabajando juntos en ese problema (el de la deuda externa)”, dijo Fernández cuando presentó a Guzmán.
El nuevo ministro es especialista en reestructuración de deudas soberanas y discípulo del Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz. También es el autor de la decisión de mayor impacto en el inicio del gobierno de Fernández: no se pedirá más dinero al Fondo Monetario Internacional (FMI) y se renegociará la deuda para evitar pagar al menos por dos años tanto el capital como los intereses.
El problema central que enfrenta el país es la deuda. Si no lo resuelve, no habrá forma de implementar un programa macroeconómico que le permita recuperarse
El FMI otorgó a Argentina un crédito de 57 mil millones de dólares a tres años, pero Fernández no aceptará la última parte, aún pendiente, a cambio de que permitan crecer al país para sacar adelante una economía en recesión y con alta inflación.
“Con el FMI ya estamos trabajando. Es un trabajo que debe hacerse silenciosamente pero que los argentinos se queden tranquilos que nos estamos ocupando del tema hace semanas. Hemos abierto un proceso de negociación, estamos satisfechos del modo que evoluciona”, declaró Fernández.
Matías Kulfas representará al ministerio de Desarrollo Productivo. Es un profesor universitario de 47 años que centra su trabajo en programas de apoyo financiero para las pequeñas y medianas empresas, sector que el presidente electo se propone impulsar como reactivador de la economía y creador de empleo.
Entre las prioridades ratificadas por Fernández figura combatir el hambre y la pobreza. Es por eso que designó en el ministerio de Desarrollo Social a Daniel Arroyo, un docente de 53 años con mucha experiencia en el tema.
