Un grupo de migrantes mexicanos cansados de vivir con miedo por las deportaciones, de soportar la burla y criminalización del presidente Donald Trump y de vivir en el olvido por parte de las autoridades de su país decidieron unirse y organizarse.
Dicen que es momento de cambiar las reglas, de invertir los papeles, que ya no serán más la piñata de Donald Trump.
Este grupo de migrantes junto con el respaldo de más de 40 asociaciones y el apoyo de líderes de opinión, figuras deportivas y del espectáculo busca crear un consejo de defensa binacional, un movimiento para defender la mexicanidad en cualquier rincón del mundo en el que haya un connacional.
Bajo el lema “Todos somos Fuerza Migrante”, desde el corazón de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, sus integrantes comenzaron la semana pasada a crear los puentes y a armar la estrategia de su movimiento.
El líder de la ofensiva es Jaime Lucero, un migrante oriundo de Puebla que en 1975 llegó a Estados Unidos sin terminar la secundaria ni hablar inglés. Veinticinco años después se convirtió en uno de los empresarios textiles más importantes de la Costa Este del país norteamericano y comenzó su labor de activista en defensa de la comunidad mexicana, convencido de que son el motor de ambos países.
“Si tenemos un presidente antimigrante y con esa actitud tan hostil es porque nosotros lo dejamos, con 20 millones de votos le podemos dar la vuelta a cualquier elección. Somos superciudadanos. Hay 20 millones de mexicanos que pueden votar en Estados Unidos y pueden también votar en México. Hay que creer en nosotros mismos, debemos de reconciliar esas divisiones y poner las piezas del rompecabezas en su lugar”, dice en entrevista con Reporte Índigo.
Para lograr la firma de las 49 organizaciones que participarán en el consejo del movimiento, Lucero y su equipo de la asociación Fuerza Migrante viajaron durante varios meses a todos los rincones de Estados Unidos para hacer labor de convencimiento.
“Ha costado mucho tiempo y muchos recursos, pero lo logramos. El objetivo es hacer un contrapeso político en México y en Estados Unidos. En los dos lugares nos urge tener esta representación
Juan Fernando Rocha, líder de la asociación Migrantes Unidos en Caravana, es el vivo ejemplo de que en los dos lados de la frontera se sufre por igual y que ya sea en México o en Estados Unidos deben de estar organizados y juntos.
Desde 2010 y todos los años posteriores, los integrantes de esta asociación salen en caravana para llegar a México a visitar a sus familiares en diciembre. El motivo fue que al tocar territorio nacional eran víctimas de la inseguridad del país y sufrían muchos abusos por parte de las autoridades. Primero de los agentes aduanales que les pedían dinero para dejarlos pasar y después por los policías de los tres niveles de gobierno, quienes también les exigían una cuota.
“Es muy importante que los migrantes nos unamos porque somos el principal motor de desarrollo de México, somos la segunda entrada de inversión extranjera y no hemos sido tomados en cuenta en las decisiones trascendentales. También es importante que nos unamos allá en Estados Unidos por los abusos que se están sufriendo”, dice Rocha.
Entre las asociaciones firmantes para la formación del Consejo binacional se encuentran Corazón Latino, Mujeres Extraordinarias, Migrantes Unidos en Caravana, Iniciativa Ciudadana, el equipo de beisbol Pericos de Puebla, el Consejo Mundial del Boxeo, el Consejo Mexicano del Deporte Profesional y la Asociación de Olímpicos y Medallistas de México.
“La unión hace la fuerza y en ese sentido Fuerza Migrante aglutina a más de 49 asociaciones. Estamos convencidos todas y todos de que debemos de estar unidos y que debemos de votar allá para que no vuelva el odio, el racismo, para que no vuelva esa persecución en contra de los mexicanos”, añade el líder de Migrantes Unidos en Caravana.
Para Daniel Aceves, exmedallista olímpico en Los Ángeles 1984 y presidente de la Asociación de Olímpicos y Medallistas de México, su alianza con Fuerza Migrante es fundamental ya que el deporte genera un sentido de pertenencia y de orgullo, lo cual es necesario para que los migrantes puedan hacerle frente a los procesos políticos y sociales que están padeciendo en la era Trump.
“Una vertiente estratégica es ratificar el orgullo de la mexicanidad y la unidad. Reconocer a los héroes deportivos y que se conozcan los héroes migrantes, los cuales son parte esencial de sustento político, económico y social de nuestro país. Hay una incomprensión histórica de reconocimiento a los 33 o 35 mil millones de dólares en remesas anuales que entran al país”.
Representación de migrantes
Además de la formación del Consejo binacional, Fuerza Migrante ha impulsado desde hace varios meses el voto de los mexicanos en el extranjero y recientemente ha promovido ante el Instituto Nacional Electoral un acción afirmativa que consiste en una reforma para que los migrantes puedan tener una representación real en el Congreso federal.
Fuerza Migrante quiere lograr la representación mediante la asignación de cierto número de curules en cada cámara para los mexicanos que residen fuera de territorio nacional.
Para promover la iniciativa, los migrantes tuvieron que hacer una serie de foros en ambos países, pero la decisión queda en manos del INE.
Al respecto el presidente de la Comisión Temporal para el Voto de los Mexicanos Residentes en el Extranjero del INE, Enrique Andrade, opina que tienen un compromiso pendiente con los connacionales.
“Los paisanos en Estados Unidos siguen siendo mexicanos y siguen aportando en lo cultural y social a sus familias. Están cercanos a México y tienen nostalgia por regresar, por eso existe un compromiso pendiente para darles voz”, dice.
La acción afirmativa y el voto en el extranjero comienzan a avanzar, pero podrían toparse de frente al fantasma de la austeridad. Según Daniel Tacher Contreras, coordinador del Observatorio Electoral Binacional de Iniciativa Ciudadana, la reforma electoral que pretende Morena podría afectar la iniciativa de representación migrante.
“Me preocupa que por el tema de austeridad y de recorte de presupuesto salga alguien a decir que el voto en el extranjero es muy caro y sugiera quitarlo. Pero derechos políticos son derechos humanos y un principio fundamental siempre es la progresividad y nunca para atrás. Entonces si a alguien se le ocurre hacer esto se puede judicializar y no creo que la Corte lo deje pasar”, alerta el especialista.
Por lo pronto, la fuerza migrante está unida, lista para romper cualquier obstáculo, venga del país que sea, como si fuera piñata.