Estados Unidos tiene una nueva poeta, una joven que, a pesar de su corta carrera en la industria literaria, con sus letras ha sabido identificar a los estadounidenses, pero sobre todo, a las minorías con las que ella se siente relacionada. Con solo 22 años de edad, Amanda Gorman ha retratado el mundo en el que vive, el país en el que creció y el gobierno que la ha representado, convirtiéndose poco a poco en un símbolo para las mujeres, los jóvenes artistas y la comunidad afroamericana.
Aunque su carrera inició desde el 2014 tras ganar el Premio Nacional de Poeta Juvenil de Los Ángeles, no fue sino hasta el pasado 20 de enero, durante la toma de posesión presidencial, que Amanda se convirtió en una de las poetas más populares de Estados Unidos, luego de presentar “The Hill We Climb”.
“No nos sentíamos preparados para ser los herederos de tan terrible momento. Pero en él hemos encontrado el poder para escribir un nuevo capítulo, para ofrecernos esperanza y risa a nosotros mismos”, se le escuchó decir.
De acuerdo con la escritora Michelle Remond, autora de Usted y la canción mixteca (Lagares México, 2016), y quien actualmente radica en California, Estados Unidos, aunque el poema de Amanda era local y para un público bien definido, eso no dejó que el mensaje fuera menos hondo.
Para Remond, ese momento fue solo el primer verso de Gorman, pues seguramente llegará a la cima, donde “yo le auguro un éxito definitivo, con el que quizá subtitulemos las más contundentes fotografías ilustrando que el futuro es mujer”.
“Ya era momento de nombrar, de nuevo, el duelo, la separación, la división, el país amoratado, el miedo, la valentía y el ser”, asegura Michelle, con respecto al trabajo de Amanda.
Será el próximo 7 de febrero, durante el Super Bowl LV, que la gente volverá a ver a Gorman y, como sucedió en el Capitolio, se espera que siga cautivando a las personas que la escuchen mientras expresa un poema inédito.
Arlene Ramírez, doctora en Relaciones Internacionales, comenta al respecto que este evento significará algo muy importante para la joven, ya que “tiene una personalidad arrolladora y una voz destacada, una voz académica, formada, pero también una voz que hoy puede tener un impacto en una sociedad sumamente lastimada y fracturada”.
En entrevista con Reporte Índigo, Ramírez enfatiza que el papel que Gorman en el Super Bowl podría ser emblemático, sobre todo por el mensaje que hoy en día se busca erradicar en Estados Unidos y que lleva años implantado, el de la supremacía blanca.
Un futuro prometedor para Amanda Gorman
A partir de que Amanda Gorman protagonizó un papel esencial en la toma de posesión del presidente Joe Biden, su rostro no ha dejado de aparecer en distintos medios, asegurando que ella representa un gran ejemplo para Estados Unidos.
En la última edición de la revista TIME, por ejemplo, donde se le vio a Gorman como el personaje principal, se habló del renacimiento negro como una manera de exaltar la presencia de las minorías en el país norte.
En ese sentido, la internacionalista Arlene Ramírez comparte que, bajo el contexto en el que se le ha presentado a Gorman, hay elementos para pensar que podrían estar preparándola, posicionándola políticamente y generando todo un concepto de marketing político en su entorno.
“No sería descabellado pensar que la estuvieran perfilando para un liderazgo eventual en el futuro. Ella representa un lado proactivo del activismo, una sociedad renovada, comprometida, representa el lado positivo del estigma que se ha plasmado sobre las minorías”, asegura Ramírez.
Finalmente, la también académica detalla que, en medio del movimiento Black Lives Matter y de la violencia policial y racial que se vive en Estados Unidos, a través de Gorman el gobierno actual podría impulsar un mensaje de unidad, un meta que posiblemente Joe Biden no logre alcanzar solo.