Hoy, la voz del presidente Andrés Manuel López Obrador no se escuchó dentro de las instalaciones del Palacio Nacional, donde día tras día se llevan a cabo las “mañaneras”. Ese plan cambió para que el mandatario tomara la palabra en otro escenario: la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Estados Unidos.
Desde hace un mes, el jefe de Estado mexicano dio a conocer este viaje con destino a la ciudad de Nueva York, asegurando que durante su asistencia al Consejo de Seguridad, el cual presidirá México durante lo que resta de noviembre, hablaría de un tema central: la corrupción, “el principal problema del mundo que produce desigualdad”.
Según se detalló en un comunicado emitido por la Secretaría de Gobernación, ese asunto se integrará a un debate abierto de alto nivel que dirigirá el presidente en el estado del norte de la Unión Americana, bajo el tema “Mantenimiento de la paz y seguridad internacionales: exclusión, desigualdad y conflicto”.
De ese modo, a fin de dar un mensaje a la comunidad internacional como representante de México, el jefe de Estado pausará sus actividades en territorio nacional durante el resto del día y hasta esta noche, haciendo uso del Artículo 88 constitucional, el cual le permite estar ausente del país hasta por siete días.
Con esta visita, el político mexicano lleva a cabo su segunda salida fuera del territorio azteca desde que tomó posesión, siendo la primera en julio de 2020 a Washington, D.C., donde se encontró con el expresidente norteamericano Donald Trump para la firma del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Éxito a nuestro Presidente @lopezobrador_ en su visita a Nueva York, durante el Consejo de Seguridad de la @ONU_es, órgano encargado de preservar la paz ? y la seguridad internacional.
Con congruencia y honestidad representará los principios de la Cuarta Transformación. pic.twitter.com/YTcS6hFJ3b
— Horacio Duarte Olivares (@horacioduarteo) November 9, 2021
Al respecto, es el maestro Erik Del Ángel Landeros, profesor de Relaciones Internacionales de la UNAM, quien considera que este viaje a la sede de Naciones Unidas es en realidad muy significativo tanto para el interior como para el exterior del país, pues reafirma el principio de que la política internacional es también política interna.
Según opina, mientras que para el ámbito nacional esta visita realza el mensaje de México como un actor de relevancia internacional, en el escenario mundial es muy importante que se escuche la voz del país para hacer saber cuáles son sus temas de interés y preocupaciones.
“También se trata de volver a reiterar todo este nuevo impulso que se le ha dado a la política exterior del país para intentar regresarle a México el lugar que tuvo durante mucho tiempo de una nación pacifista que defiende las causas más justas de ciertas agendas internacionales”, asegura Del Ángel Landeros.
Por otro lado, el académico comparte que con esta participación, México robustecerá indirectamente su “poder suave”, y en ese sentido podrá usar su voz para impulsar los temas de su agenda y también obtener un gran prestigio en otros foros o espacios, donde incluso podría lograr concretar asuntos bilaterales con otros países que tengan mayor peso.
“Digamos que de manera indirecta su presencia en el Consejo de Seguridad (de la ONU), y con la intervención del presidente, México se lleva un rango mucho mayor, con mayor autoridad y prestigio internacional para poder inducir que sus causas avancen de manera favorable en el mundo, acompañado también de otros muchos países que lo van a seguir”, apunta.
Entre los temas que hoy podría dejar sobre la mesa el presidente mexicano, además de la corrupción como él mismo lo aseguró, podría estar el tráfico de armas, la autodeterminación de los pueblos, así como la no proliferación de las armas nucleares.
Sin embargo, una problemática que podría enfrentar el mandatario para que estos temas sigan avanzando, dice el maestro Erik, es que las cinco naciones que tienen veto en el Consejo de Seguridad no las acepten, pues no sólo depende México impulsarlas.
Nuestros queridos amigos y compañeros mexicanos en el exterior, se encuentran esperando al Presidente @lopezobrador_ apoyando su histórica visita a la #ONU en Nueva York. #Yeidckol pic.twitter.com/8xAS4PrDsJ
— Yeidckol Polevnsky (@yeidckol) November 9, 2021
En espera de mayor diálogo en Naciones Unidas
Luego de dar su discurso ante la sede de la ONU, el presidente López Obrador no dará por terminado su viaje a la Unión Americana, pues también se reunirá con el secretario general de la organización, António Guterres.
Con el diplomático, el jefe de Estado entablará un diálogo para revisar la relación y colaboración de México con las Naciones Unidas, para después dar a conocer un informe final a la Mesa Directiva del Senado mexicano.
En este documento, además de detallar el diálogo entre López Obrador y Guterres, se espera que se engloben los compromisos emitidos por el presidente durante su discurso en la sede de Naciones Unidas, entre ellos la entrega equitativa de vacunas contra el coronavirus en todo el mundo, un tema que el morenista ha enfatizado desde hace tiempo.
“Creo que también va a hablar sobre el tema de las vacunas (…) El asunto de democratizar su acceso a todos los países para su ingreso y circulación alrededor del mundo, un tema en el que ha estado insistiendo México”, remarca el catedrático.
Así también, se prevé que el presidente no deje de lado otros rubros tanto con el secretario general de Naciones Unidas como en su discurso individual, como la importancia de los tratados internacionales como mecanismo de defensa para resolver conflictos, y evidentemente la defensa y promoción de los derechos humanos en el mundo.
“Todo esto ha sido muy insistente y congruente, no se han salido del script ni del presidente ni de la cancillería mexicana (…) Además, son temas que van muy acorde a la carta de Naciones Unidas”, agrega el maestro Del Ángel Landeros.
