La amnistía al narcotráfico es una de las propuestas que más ha generado ruido en este periodo de campañas electorales. Esta iniciativa del candidato Andrés Manuel López Obrador ha sido el pretexto perfecto para que el resto de presidenciables lo ataquen. Margarita Zavala, Ricardo Anaya, José Antonio Meade y Jaime Rodríguez ‘El Bronco’ consideran que esta iniciativa significa perdonar a quienes según sus palabras han provocado la violencia en México.
No sería la primera vez que en un país se concede amnistía a grupos relacionados con el narcotráfico. En El Salvador y Colombia se aplicaron propuestas de este tipo o diálogo con agrupaciones criminales. El resultado inmediato fue la disminución de homicidios en ambos países, pero las consecuencias secundarias más recientes son el aumento de la tasa de asesinatos en el país centroamericano y la creación de grupos disidentes que cometen delitos en la nación de América del Sur.
Durante el primer debate presidencial el domingo pasado, Anaya afirmó que hace 25 años en Colombia se intentó una amnistía y “se disparó la violencia”. El candidato por la coalición Por México al Frente hacía referencia a cuando representantes del Cártel de Medellín intervinieron ante el gobierno para anular la extradición a Estados Unidos a cambio de frenar los actos terroristas. Sin embargo, en ese entonces no hubo una amnistía, sino una ley de sometimiento a la justicia. Esta norma otorgaba garantías para promover la entrega de los delincuentes.
Al contrario de lo que aseguró Anaya, a partir de esa ley disminuyeron los homicidios y la intensidad del conflicto armado en Colombia. De acuerdo a los registros del centro de investigación independiente Fundación Ideas para la Paz, en 1993 hubo 28 mil 173 homicidios y en 1995 disminuyó con un registro de 25 mil 398. En 1996 volvió a aumentar con 26 mil 642 casos y en 1998 disminuyó con 23 mil 87, entonces parece que no hubo un cambio constante ni a largo plazo después de la implementación de esta iniciativa.
Por otra parte, en diciembre de 2016, el Congreso colombiano promulgó una ley de amnistía. Según la organización Human Rights Watch, la norma contiene disposiciones que podrían permitir que los responsables de crímenes “atroces” se beneficien de amnistías.
Aunque los homicidios han disminuido los últimos dos años en Colombia, los grupos disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han aumentado y han logrado abarcar más territorio. La Fundación Ideas para la Paz publicó este mes un estudio que se titula “Trayectorias y dinámicas territoriales de las disidencias de las FARC” en el que afirma que estas agrupaciones han aumentado su actividad y entre junio de 2016 y el 27 marzo de 2018 han cometido por lo menos 147 delitos en cerca de 13 departamentos, a los que se suman las 8 actos delictivos que han afectado a Ecuador.
También durante el primer debate presidencial, Anaya comentó que se planteó una ley de amnistía en El Salvador y aumentaron los homicidios. “Vean lo que ocurrió, se fueron a 108 homicidios por cada 100 mil habitantes…Plantear el perdón a los criminales es una locura que generaría enorme violencia en el país”, afirmó el candidato. Anaya se refería a que en El Salvador se creó una ley en 1993 con el objetivo de regular la forma de conceder amnistía a todas las personas que participaron de delitos políticos, comunes y conexos antes del 1 de enero de 1992, en el marco de la guerra civil de 1980 a 1992 en el país centroamericano.
Al contrario de la declaración del candidato de Por México al Frente, los homicidios en El Salvador disminuyeron con esta norma. En 1994, la Fiscalía de El Salvador reportó un total de 9 mil 135 homicidios. Para el año siguiente, la misma dependencia sumó 8 mil 485 expedientes de homicidio. En 1996, reportó 8 mil 47. Para 1997, hasta el mes de mayo, informó 2 mil 421 homicidios. En 2017, el Instituto de Medicina Legal de este país tenía un registro de 3 mil 954 homicidios.
Aunque en un principio, la cifra de homicidios disminuyó, la Corte Suprema de Justicia salvadoreña declaró inconstitucional la ley de amnistía en 2016 porque otorgó el perdón a las violaciones de los derechos humanos cometidas en esta época. El mismo año, se abrieron investigaciones penales por 30 crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra cometidos por militares, funcionarios públicos y guerrilleros. Estos delitos fueron descubiertos por la denominada Comisión de la Verdad.
Además, durante el primer debate presidencial, López Obrador señaló que la posible amnistía “no significa impunidad” y que con esta propuesta buscaría atender las causas que originaron el problema de inseguridad y violencia.
“Voy a convocar a expertos para elaborar un plan y definir conjuntamente qué vamos a hacer y en ese marco, definir cómo se va a llevar a cabo una amnistía. Estoy invitando hasta al Papa Francisco a participar en este foro”, añadió el candidato.
Imposible una ley de amnistía en México
El doctor Arturo Argente Villarreal, director de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey en Toluca, explicó que no funcionará una ley de amnistía en México debido a la fragilidad de las instituciones mexicanas y el incumplimiento del Estado de derecho. El especialista agregó que tampoco sería factible esta iniciativa debido a la corrupción, la impunidad y el narcogobierno que imperan en el país.
Argente Villarreal también expuso que no se puede comparar la problemática que vivieron los dos países latinoamericanos con la situación en México porque este país es mucho más grande que las naciones que aplicaron leyes de amnistía.
“Ayer fuimos testigos de cómo la célula de un cartel asesinó a tres jóvenes con todo un futuro por delante. Ese tipo de características de inseguridad y la variedad de cárteles que conforman el narcotráfico en México no lo tenía en su momento Colombia y El Salvador”, agregó el especialista.
El director de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno agregó que no se puede permitir que la inseguridad y los cárteles se sigan infiltrando en el gobierno federal y estatal.
“Tenemos que fortalecer nuestro Estado de derecho, tenemos que fortalecer a la procuraduría general de la república y darle autonomía y fortalecer las fiscalías de los estados y la policía”, argumentó.
Otros países con leyes de amnistía en América Latina
Las leyes de amnistía no sólo se han aplicado para proteger a personas relacionadas con el narcotráfico. En países de América Latina se han utilizado en casos de regímenes autoritarios.
De acuerdo al informe más reciente de la organización Human Rights Watch, los autores de violaciones de derechos humanos durante el régimen militar de 1964 a 1985 en Brasil siguen eludiendo la justicia por efecto de una ley de amnistía de 1979, que fue ratificada por la Corte Suprema en 2010.
En Argentina, la justicia llegó después de que se anulara la ley de amnistía. Los juicios en contra de quienes cometieron delitos durante el último gobierno militar argentino fueron posibles gracias a una serie de medidas adoptadas a comienzos de 2000. Una de las medidas fue que el Congreso declaró la nulidad de las leyes de amnistía y los indultos concedidos a exmilitares implicados en crímenes. En estos dos casos en América Latina, las leyes de amnistía protegieron a personas que habían cometido delitos contra los derechos humanos.
¿Qué es la amnistía?
Uno de los principales problemas que obstruye la discusión pública sobre la propuesta de Obrador es que no existe un consenso sobre la definición de amnistía. De acuerdo al documento “Instrumento del Estado de derecho para sociedades que han salido de un conflicto” de las Naciones Unidas, se designan con la palabra amnistía las medidas jurídicas que tienen como efecto impedir el enjuiciamiento penal o las acciones civiles contra personas con respecto a una conducta criminal específica cometida antes de la aprobación de la amnistía. También puede ser la anulación retrospectiva de la responsabilidad jurídica anteriormente determinada.
Según este documento, las amnistías no impiden que se haga efectiva la responsabilidad jurídica respecto de una conducta que todavía no ha tenido lugar porque constituiría una invitación a violar la ley.
Por otra parte, la palabra amnistía deriva del vocablo griego amnestia, que es también la raíz de amnesia. La raíz griega connota el olvido, no el perdón, de un crimen que ya ha sido objeto de una condena penal.