Andrew Cuomo, en espera de un juicio tras ser acusado de acoso sexual por la Ficalía de NY

A lo largo de su carrera política, Andrew Cuomo, gobernador de Nueva York, ha enfrentado diferentes retos. Sin embargo, ninguno como el que hoy en día podría arrebatarle su cargo.

A inicios de este año, el demócrata comenzó a ser señalado por cometer acosos sexuales, empezando por una mujer de nombre Lindsey Boylan, quien aseguró vivir insinuaciones por parte del gobernador durante dos años. Tras esta declaración, 10 casos más salieron a la luz, destacando diferentes actos inapropiados por parte del político.

El pasado 3 de agosto, esos casos fueron detallados a través de un informe de 165 páginas, el cual fue emitido por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, concluyendo que Cuomo sí cometió dichas acciones.

Según James, quien tomó el caso del funcionario desde hace cinco meses, su resultado se enfocó en la realización de 179 entrevistas, la revisión de 74 mil pruebas, e incluso un interrogatorio al propio demócrata.

Ante este resultado, las reacciones no tardaron en aparecer, destacando las opiniones del presidente Joe Biden y de la líder de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quienes coincidieron en que Cuomo debería dimitir.

“Reconociendo su amor por Nueva York y el respeto por el cargo que ocupa, pido al gobernador que renuncie”, declaró Pelosi.

Al respecto, es la maestra Raquel Saed, especialista en política y medios de Estados Unidos y académica de la Universidad Iberoamericana, quien opina que a pesar de los pronunciamientos de Biden y Pelosi, es poco probable que el gobernador dimita al corto plazo, sino que decida llegar hasta las últimas consecuencias.

De acuerdo con la especialista, dichos escenarios serían: uno, que lo comiencen a perseguir legalmente, pues las acusaciones en su contra representan una violación de la ley estatal y federal; o dos, que se lance un impeachment para que sea el Congreso el que analice si deja o no su puesto político.

“Biden no puede quitar a un gobernador ni a un legislador, sólo a la gente de su gabinete, y como Andrew Cuomo es una persona que llegó por elección popular, será el propio Congreso del estado el que lo pueda destituir”, detalla Saed.

Por otra parte, Claudia Edith Serrano Solares, posdoctorante de la Unidad Académica de Estudios Regionales (UAER) de la UNAM, destaca que Cuomo no dimitiría tan rápidamente, pues al hacerlo dejaría entrever que sí cometió los acosos sexuales por los que lo culpan.

“Me parece que va a mantenerse lo más que pueda, debido a que si renuncia se abriría la brecha en cuanto a su culpabilidad, y en ese sentido estaría aceptando que sí es responsable”, comparte Serrano Solares

Hasta el momento, el gobernador ha enfatizado a través de un video compartido en sus redes sociales y un comunicado oficial que no es culpable como lo menciona el informe, pues “nunca se ha comportado de esa manera”, refiriéndose a acercamientos inapropiados hacia las mujeres.

Andrew Cuomo, con un futuro incierto

Antes de que las acusaciones de acoso sexual abordaran la imagen de Andrew Cuomo, este político era uno de los demócratas más populares para su partido, llevándolo incluso a ser señalado como uno de los posibles futuros candidatos a la presidencia.

Sin embargo, con el escenario actual, ese futuro está cada día más lejano de alcanzar, sobre todo si se toma en cuenta el protagonismo que el gobierno actual le está dado al poder femenino, a la equidad de género y al movimiento #MeToo.

Además, otro de los factores que podrían frenar aún más su camino es la falta de apoyo del resto de los demócratas, quienes hasta el momento no se ve que vayan a respaldar las acciones de Cuomo, sino todo lo contrario.

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“Ahorita están saliendo las voces de los demócratas diciendo que se vaya, porque si alguno de ellos, sobre todo uno que tenga la luz pública encima, dijera que lo apoya y que está con él después de darse a conocer los resultados del informe, esa persona definitivamente se estaría jugando su capital político”, distingue la maestra Raquel Saed.

Por otra parte, quienes podrían tomar esta situación como una ventaja son los representantes del Partido Republicano, ya que las acusaciones contra el gobernador serían una carta más a su favor para hablar negativamente de los demócratas ante la opinión pública.

“Este caso en particular puede ser el arma o la gasolina para los republicanos y decir: ‘miren lo que hacen los demócratas’. Ellos van a atacar con todo a Cuomo”, dice Saed.

En ese sentido, no sólo se espera ver cuáles serán las próximas reacciones opositoras contra Andrew Cuomo, sino cómo él continúa defendiéndose a pesar de lo evidente.