Los arrestos a inmigrantes en Estados Unidos continúan. La reciente detención de 150 personas indocumentadas en el sur de California hizo recordar las múltiples capturas en el país norte desde que Donald Trump es presidente.
Hoy concluye un operativo relámpago que el Servicio de Inmigración y Control de Aduana (ICE, por sus siglas en inglés) realizó durante tres días en 38 ciudades y localidades al sur de Estados Unidos, donde en total se han arrestado a 330 personas ilegales.
“La operación estuvo enfocada en delincuentes convictos y personas que habían violado las leyes de inmigración”, dijo Thomas Giles, director encargado de Operaciones y Cumplimiento y Remoción (ERO) de la oficia de ICE.
Giles agregó que el 90 por ciento de los detenidos tenían condenas criminales, y que el 40 por ciento había sido puesto en libertad por agencias locales.
De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), más de mil personas son detenidas en la frontera sur de Estados Unidos, después de que el presidente Trump ordenara el refuerzo de seguridad al sur de su país.
“CBP despliega personal altamente capacitado que detiene a más de mil personas cada día por presuntas violaciones de las leyes de Estados Unidos”, informó la Oficina.
Este 26 de septiembre, 98 inmigrantes, la mayoría de ellos con antecedentes penales, fueron detenidos en varias ciudades al norte de Texas y Oklahoma en un operativo que duró 10 días.
En un comunicado, el ICE precisó que en el operativo se arrestaron a 87 hombres y 11 mujeres, de entre 19 y 62 años.
El Servicio especificó que 29 de los 98 arrestados habían regresado de manera ilegal a Estados Unidos después de ser deportados previamente, un delito que se puede llegar a pagar hasta con más de 10 años en prisión.