El juicio a los tres activistas que pone bajo la lupa al gobierno del presidente de China, Xi Jinping, inició ayer.
Bajo fuertes medidas de seguridad, en una corte distrital en la ciudad de Xinyu, en la provincia oriental de Jiangxi, se juzga a Xu Zhiyong, Song Ze y Li Huanjun, defensores de los derechos humanos y la transparencia del sector público.
Los acusados son parte de una red de activistas conocida como Movimiento de los Nuevos Ciudadanos, cuyos miembros han pedido a las autoridades que declaren sus propiedades para ayudar a frenar la corrupción.
Los activistas de esta organización han realizado pequeñas manifestaciones pacíficas en varias ciudades, donde usualmente participa un puñado de gente que porta carteles, da discursos y junta firmas.
El caso está siendo observado por las organizaciones defensoras de los derechos humanos debido a la intolerancia que ha mostrado el Partido Comunista a los desafíos políticos organizados.
La policía utilizó barreras de plástico para mantener lejos del tribunal a las personas que siguen el caso, entre ellas a diplomáticos de Estados Unidos, la Unión Europea y Canadá.
Unas dos decenas de integrantes del grupo han sido arrestados o detenidos brevemente desde marzo, lo que pone de relieve la preocupación de los líderes chinos por las protestas que podrían ganar impulso y desafiar el gobierno del Partido Comunista. (AP)