Bipartidismo resucitado

La ola ciudadana que España vivió en las elecciones regionales podría perder fuerza rumbo a las votaciones generales.

Los nuevos partidos que surgieron de movimientos civiles, como Podemos y Ciudadanos, debilitaron en las votaciones locales del 24 de mayo a los principales partidos españoles, el Popular (PP) y el Socialista Obrero Español (PSOE).

Pedro Pablo Cortés Pedro Pablo Cortés Publicado el
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Algunos medios y analistas tradicionales despiertan desconfianza entre la población hacia los partidos de extracción ciudadana
"No siempre 1+1+1 suman 3, a veces suman 2, y Podemos es el actor fundamental. Pero hay que pensar cuál es la mejor herramienta (para ganar)”
PodemosFuentes anónimas del partido

La ola ciudadana que España vivió en las elecciones regionales podría perder fuerza rumbo a las votaciones generales.

Los nuevos partidos que surgieron de movimientos civiles, como Podemos y Ciudadanos, debilitaron en las votaciones locales del 24 de mayo a los principales partidos españoles, el Popular (PP) y el Socialista Obrero Español (PSOE).

Pero una nueva encuesta de la agencia Metroscopia mostró ayer que el PP y el PSOE recuperan terreno rumbo a las elecciones generales, que se celebrarán a más tardar en diciembre y en las que se elegirá al Congreso y al presidente de Gobierno. 

El sondeo informa que el PP lidera las preferencias electorales con una intención de voto del 24.5 por ciento, cuatro puntos porcentuales más que en abril.

El PSOE aparece en segundo con un 23 por ciento de las menciones, un punto más que el bimestre anterior.

Mientras tanto, Podemos muestra una tendencia a la baja y se ubica en tercer lugar con 21.5 por ciento de la intención de voto.

El más afectado es Ciudadanos, que aparece en cuarto lugar con 13 por ciento de los votos, casi siete puntos porcentuales menos que en abril.

El análisis del diario El País explicó que la reconfiguración se debe a que las victorias ciudadanas en ciudades como Madrid y Barcelona tuvieron alianzas y coaliciones abruptas que inquietaron a un sector del electorado. 

“La línea de la que pendían cuatro fuerzas políticas con idénticas posibilidades de ganar las elecciones generales se ha quebrado, probablemente a resultas de las elecciones municipales y autonómicas del pasado 24 de mayo”, publicó el diario.

“Este baile en la ordenación de los cuatro partidos se alimenta de las actitudes percibidas por los ciudadanos durante la campaña electoral y también de la incierta configuración de los gobiernos municipales y autonómicos”. 

Ciudadanos divididos

Ante estas estadísticas, algunos líderes han pedido lanzar a un candidato ciudadano de unidad para tener mejores posibilidades de vencer a los partidos tradicionales.

Alberto Garzón, líder de Izquierda Unida, aseguró que los partidos ciudadanos de izquierda deben lanzar una candidatura conjunta si quieren terminar con la hegemonía del PP y el PSOE.

“El único camino puede ser la unidad popular porque lo que ha demostrado la experiencia de Madrid, por ejemplo, es que ninguna fuerza en solitario puede transformar esta sociedad, puede derrotar a Mariano Rajoy (actual presidente de España)”, declaró Garzón tras las votación regional.

“El mensaje es nítido, clarísimo, cuando la gente va unida se sacan mejores resultados porque la gente reconoce que esas sumas multiplican y ese es el camino”. 

Sin embargo, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, rechazó esto al argumentar que su partido es el único que puede acoger a todos los sectores interesados.

“La apuesta por el cambio nada tiene que ver con acuerdos entre partidos ni en balsas de salvamento para nadie”, señaló Iglesias al periódico El Mundo. 

¿Se repetirá el ‘sueño’?

En las elecciones regionales de mayo, el PP y el PSOE obtuvieron, en conjunto, tres millones de votos menos que en las votaciones del 2012. 

Aunque compartieron el 52 por ciento de los votos, las coaliciones ciudadanas les arrebataron ciudades clave, como Madrid y Barcelona.

Pero algunos analistas y medios tradicionales están cuestionando la capacidad de gobernar de estos gobiernos de extracción ciudadana, lo que ha despertado desconfianza entre la población, con lo que se explicaría el descenso en las encuestas.

“La futura alcaldesa de Barcelona (Ada Colau) se rodea de ediles sin más CV que su activismo”, publicó ayer el diario conservador ABC. 

“’No tengo duda de la capacidad de Colau para liderar a su gente, pero no me queda claro si su equipo tiene experiencia y cohesión’, añade en declaraciones a este diario un alto cargo municipal”.

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