California se rebela contra Trump; oficialmente ya es ‘estado santuario’
A partir del próximo año, California limitará la información de ciudadanos migarntes a funcionarios federales
Indigo StaffEl gobernador de California, el demócrata Jerry Brown, promulgó hoy la ley que convierte a la entidad más poblada de Estados Unidos en un “estado santuario” para inmigrantes, en desafío al gobierno de Donald Trump.
La Ley Senatorial 54 limitará a partir del 1 de enero la información que el estado de California puede compartir con autoridades migratorias federales, a pesar de la amenaza del presidente Trump de recortar fondos a las entidades “santuario”.
“Estos son tiempos inciertos para los californianos indocumentados y para su familia y esta ley logra un balance de proteger la seguridad pública, al tiempo que lleva medidas de tranquilidad aquellos que están viviendo con miedo todos los días”, dijo Brown.
La Casa Blanca, que ha montado una ofensiva contra las ciudades “santuario” desde enero pasado, calificó la decisión del gobernador como “irresponsable”.
Aunque los edictos de cada ciudad o condado tienen efectos diferentes, las ciudades “santuario” rechazan en general entregar a las autoridades a inmigrantes que sólo cometieron la falta administrativa de ingresar ilegalmente al país, pues no se considera un delito grave.
Entre 2010 y 2014 las ciudades santuario rechazaron más de 17 mil peticiones (detainers) de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), que permiten a las autoridades retener a una persona durante 48 horas adicionales para decidir si es acusado formalmente o deportado.
Las ciudades “santuario” forman parte de un movimiento iniciado en Los Ángeles en 1979, luego que la ciudad emitió la Orden Especial 40, que prohibió a sus agentes policiales inquirir sobre el estatus migratorio de una persona detenida.
Desde entonces, un total de 364 condados y 39 ciudades han aprobado ordenanzas similares, incluidas algunas de las más grandes de Estados Unidos como Nueva York, San Francisco, Washington DC, Miami, Seattle, Chicago, Baltimore, Sacramento y Filadelfia.
Se estima que poco menos de la cuarta parte de los más de 10 millones de inmigrantes indocumentados que residen en Estados Unidos viven en el estado de California.