La carne asada es ahora más que un pretexto para conversar con los amigos y pasar el fin de semana, en Argentina.
Alejandro Lucchesi, un realizador audiovisual argentino, recién creó junto con algunos amigos la organización “En Asados”, cuyo propósito es fomentar la integración social mediante fiestas de carne asada, un ícono de la cultura y las tradiciones de Argentina.
Durante los asados, explica Lucchesi a Reporte Indigo, los vecinos de las colonias conviven para estrechar sus lazos.
Además, las organizaciones no gubernamentales (ONG’s) encuentran un lugar para intercambiar ideas, idear nuevos proyectos en conjunto, y comenzar a colaborar entre ellos.
“El objetivo que buscamos es la integración social, es decir, generar unión y posibilitar proyectos a futuro con dichas entidades o entre los convocados”, indica Lucchesi, “¿Por qué lo hacemos mediante de un asado? Los motivos nacen del propio carácter tradicional del asado.
“Para muchos argentinos, el asado constituye la excusa para hablar, intercambiar ideas, conocer al otro, compartir un espacio cultural acompañado de guitarras. El contexto que se genera espontáneamente en un asado es perfecto para la interacción”.
El joven argentino considera que la carne asada es una tradición argentina tan fuerte y extendida, que logra desaparecer los prejuicios y superar las diferencias sociales.
Esto se convierte en un espacio ideal para rescatar los tres valores que pretenden promover: el conocimiento, el respeto y el aprendizaje.
“El asado para los argentinos es una de sus tradiciones más fuertes que existe en todas las familias y grupos”, expone Lucchesi, “es un punto de encuentro natural”.
De hecho, la iniciativa surgió de varios asados entre amigos a los que llegaban cada vez más personas, lo que los llevó a pensar que debían aprovechar tanto capital social.
“La asociación se encuentra en su etapa de inicio y hasta al momento se encuentra conformada por algunos amigos y personas con intereses afines. Esa es la base”, dice.
Aun así, su proyecto ya ha dado frutos en lugares como la cooperativa La Juanita de la Matanza, una especie de incubadora social, ubicada en la provincia de Buenos Aires.
Por ello, Lucchesi espera que la iniciativa se replique en otras regiones de América Latina, como en Monterrey, donde la carne asada también es una fuerte costumbre.
“De estar interesados, sean embajadores de nuestra iniciativa. Sería muy lindo saber que la idea se lleva a cabo en Monterrey. Es algo simple de llevar a cabo y la satisfacción de generar unión es muy grande”, manifiesta.