Ciudadanos ingleses, así como políticos de Reino Unido, se pronunciaron luego de que se anunciara que la compañía franco-holandesa ganó una licitación de 490 millones de libras para elaborar el nuevo pasaporte británico, en medio de la separación de Inglaterra y la Unión Europea, derivada del brexit.
La noticia fue dada a conocer por Martin Sutherland, director ejecutivo de De la Rue, empresa que se encargaba de elaborar el documento.
En una carta dirigida a los medios de comunicación británicos, Sutherland señala que la decisión afecta a los trabajadores de su compañía, a los que calificada como “dedicados”.
De la Rue trabaja con gobiernos de 140 países, y llevaba nueve años fabricando el pasaporte, al que califica como “un icono británico”.
Tras el anuncio, las acciones de De la Rue cayeron un 14 %.
Tras las quejas de ciudadanos ingleses, el ministro de Cultura, Matt Hancock, aseguró que la decisión todavía no estaba tomada.
Tras las votaciones a favor del brexit, el Ministerio del Interior anunció esfuerzos para fabricar un pasaporte azul, con el propósito de diferenciarlo del rojo, utilizado en el resto de la Unión Europea.
“Nuestro deber es apoyar a nuestra propia industria, y decisiones como ésta fueron las que empujaron a la gente a votar por el Brexit”, señaló el diputado John Spellar.
