El gobierno de China anunció que aplicará nuevos aranceles a las importaciones estadounidenses por 60 mil millones de dólares en respuesta a los gravámenes impuestos horas antes por el presidente Donald Trump.
“China siempre ha enfatizado que la única forma correcta de resolver el problema comercial chino-estadounidense es a través de conversaciones y consultas sostenidas sobre una base equitativa, sincera y mutuamente respetuosa. Pero en este momento, todo lo que hace Estados Unidos no da la impresión de sinceridad o buena voluntad”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Geng Shuang durante una conferencia.
No obstante, Pekín decidió cobrar un rango menor de tarifas a lo establecido inicialmente. El nivel de los aranceles será de entre 5 y 10 por ciento, en lugar del 5, 10, 20 y 25 considerado por el Ministerio de Finanzas chino.
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En este sentido, el gobierno de Xi Jinping aplicará un impuesto de 10 por ciento a mercancías provenientes de la Unión Americana que anteriormente habían sido designadas con tasas de 20 y 25 por ciento.
Estas medidas entrarán en vigor el próximo 24 de septiembre, fecha en que la administración de Trump aplicará nuevos impuestos de 10 por ciento a mercancías chinas por un valor de 200 mil millones de dólares.
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A la par del anuncio, el gobierno asiático presentó una queja ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) contra Estados Unidos por los nuevos aranceles.
El lunes, el republicano advirtió que si el dragón asiático tomaba medidas de represalia contra los agricultores o las industrias estadounidenses se anunciarían más gravámenes.
