Luego que Donald Trump ordenó este jueves imponer a China aranceles en importaciones y limitar sus inversiones en empresas estadounidenses, el gigante asiático sugirió a Estados Unidos que “cese y abandone” las medidas, al tiempo que advirtió no temer una guerra comercial.
La nación asiática aseguró que las medidas anunciadas por Trump son una derrota para el pueblo de Estados Unidos, pues éstas lastimarán directamente los intereses de consumidores, empresas y mercados financieros.
Diversos especialistas han advertido que la imposición de aranceles podría desatar la madre de las batallas comerciales, adicionada con una dosis de nacionalismo de ambas partes, lo que finalmente podría afectar los precios a nivel mundial.
La orden de Trump señala que el representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, desarrollará, a más tardar en dos semanas, un listado de productos chinos cuya importación sería gravada con estos nuevos aranceles.
China podría responder de la misma manera, al imponer nuevos aranceles a los productos estadounidenses que ingresen a la nación asiática, lo que generaría una guerra comercial.
Los chinos ya han dicho no temer a una batalla comercial, mientras que Trump en el pasado ha señalado que las guerras comerciales no son tan malas como parecen.
Wall Street resiente decisión de Trump
Las acciones se desplomaron el jueves después de que el gobierno del presidente Donald Trump impuso sanciones contra los productos e inversiones chinas. El promedio industrial Dow Jones perdió más de 700 puntos ante el temor de los inversionistas de que se incrementen las tensiones comerciales entre las dos economías más grandes del mundo.
Este jueves se alejaron de las acciones y adquirieron bonos, lo que incrementó su precio y redujo su rendimiento. Ante el descenso en las tasas de interés, los bancos registraron algunas de las mayores pérdidas. Las compañías tecnológicas e industriales, los fabricantes de materiales básicos y las empresas del sector salud también tuvieron bajas considerables.
Peter Donisanu, analista de estrategias de inversión en Wells Fargo Investment Institute, dijo que el riesgo de una dañina guerra comercial sigue siendo bajo debido a que el gobierno federal va contra productos específicos que no son fundamentales para la economía china. Eso podría cambiar si ordena aranceles a productos como electrónicos o electrodomésticos procedentes de China.