Ciegos al racismo

De acuerdo con datos del Ministerio del Interior francés, la violencia asociada con el racismo aumentó un 14 por ciento entre el 2012 y 2014; del cual el 36 por ciento de los crímenes cometidos son antisemitas. 

En su informe, los expertos de la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI) también denuncian la homofobia y la discriminación contra los ciudadanos de Rumania.

“Las expresiones de odio se han convertido en algo normal dentro de la esfera pública en Francia, y esto nos preocupa mucho”, dijo el Secretario General de esta organización paneuropea, Thorbjorn Jagland, e hizo un llamado a los políticos a “abstenerse de hacer declaraciones que estigmaticen a las ya vulnerables minorías, porque con ellos exacerban las tensiones dentro de la sociedad francesa.”

Laicismo restrictivo

El informe emitido este 1 de marzo por el Consejo Europeo menciona una serie de casos en donde la laicidad y la libertad de culto están siendo ignoradas. 

Tal es el caso de la alarmante persistencia del discurso islamofóbico, en particular entre los líderes más influyentes de la escena política actual como Marine Le Pen, dirigente del partido de ultraderecha Frente Nacional, que comparó las oraciones musulmanas de la calle con la ocupación alemana durante la Segunda Guerra Mundial. 

Esta comparación extremadamente cruel, por tratarse de un episodio de la historia muy penoso para Francia y los franceses, no solo ofendió a la comunidad musulmana, hirió a la comunidad judía y a la sociedad civil, entre ellos veteranos y sobrevivientes.    

“Todo comenzó hace 15 años con el velo, y empezaron a verse en Francia más y más velos. Luego fue el turno del burka, y ahora hay más y más burkas. Y ahora las oraciones en plena calle (…) estas personas quieren monopolizar el territorio” señaló Le Pen en el marco de su campaña por la dirigencia del partido en 2010. 

“Para aquellos que les gusta mucho hablar sobre la Segunda Guerra Mundial, este es un buen tema, porque nos encontramos de nuevo frente a una ocupación territorial”.

La ECRI también cita el polémico caso de Gilles Bourdouleix, diputado y alcalde de Cholet, una provincia al norte de Francia, quien durante un altercado ocurrido en tierras agrícolas, que se encontraban ilegalmente ocupadas por viajeros, se refirió a las personas involucradas diciendo: “Lamentablemente Hitler no mató lo suficiente.”

O bien, los casos de opinión sin fundamento teológico, como las afirmaciones del alcalde del partido republicano, Jean- Francois Cope, que dijo que los musulmanes incrementaban la violencia en el país, como “los actos de robar comida, porque no comen bien durante el Ramadán”. 

Medidas urgentes

La ECRI expresa su alarma por el aumento de estas expresiones de odio y su repercusión en la sociedad, como la propagación de actos de violencia contra judíos, musulmanes y minorías étnicas o la falta de un programa educativo eficaz en las escuelas. 

Si bien el informe fue emitido a principios de este mes, lo que más llama la atención es que este llamado urgente a las autoridades francesas contra la alza del racismo en el país, se redactó antes de los ataques terroristas de noviembre de 2015 en París, lo que demuestra que la alza de la violencia no se disparó por los ataques, sino que se viene gestando de muchos años atrás y las recomendaciones siguen siendo completamente relevantes al día de hoy.

A este respecto, las siguientes dos recomendaciones han de ser aplicadas de manera prioritaria en un plazo de dos años y serán objeto de un seguimiento estricto por la propia Comisión Europea.

Uno; revisar los planes de estudio y programas de formación de profesores para promover una mejor comprensión de las cuestiones relacionadas con la religión y la inmigración en los colegios.

Dos; las autoridades deben asegurar una dirección administrativa mientras se resuelven las solicitudes de residencia presentadas por los miembros de minorías, como los rumanos, a fin de no obstaculizar su acceso a los “derechos básicos”, incluida la seguridad social o la escolarización de sus hijos.

Por último, la ECRI lamenta el aumento del discurso de odio en Internet y dentro de las redes sociales, “a pesar de los esfuerzos de las autoridades para frenar este fenómeno”, y a este respecto, la organización paneuropea también pide una legislación para la homofobia “para evitar sucesos como los ocurridos durante las protestas contra el matrimonio homosexual en el 2013”.