Coronas en barata
Europa vive uno de los momentos más difíciles de su historia gracias a una crisis económica que ha golpeado prácticamente todos los rubros de la vida de sus ciudadanos.
El continente se debate entre vivir en los ajustes de la austeridad para sanear las finanzas de la eurozona y aproximarse a una debacle monetaria de proporciones catastróficas.
La vida del euro pende de un hilo, por más que haya declaraciones y pronósticos optimistas.
APEuropa vive uno de los momentos más difíciles de su historia gracias a una crisis económica que ha golpeado prácticamente todos los rubros de la vida de sus ciudadanos.
El continente se debate entre vivir en los ajustes de la austeridad para sanear las finanzas de la eurozona y aproximarse a una debacle monetaria de proporciones catastróficas.
La vida del euro pende de un hilo, por más que haya declaraciones y pronósticos optimistas.
Y casi nadie ha estado exento, pues los involucrados en la dieta económica van desde los hogares, los equipos de fútbol que han dejado atrás el despilfarro –salvo extraños casos como el Paris Saint Germain que acaba de gastar 79 millones de dólares en la adquisición de Zlatan Ibrahimovic y Thiago Silva – y el mismo aparato de gobierno.
Basta decir que los tiempos de derroche y lujos ya son posibles en muchas de las casas reales de Europa, a las que también les ha tocado una partida del duro golpe de la crisis.
Nadie verá a la princesa española Letizia Ortiz viajando en metro, ni a la reina Isabel de Inglaterra volando en turista.
Sin embargo, las principales noblezas del Viejo Continente han comenzado a experimentar en carne propia la ola de austeridad.
Y en plena batalla contra la recesión y una crisis de la deuda que amenaza la estabilidad del euro, reyes y príncipes han tenido que someterse a la dieta de la moderación.
El último viaje del monarca español a Botswana a cazar elefantes en medio de la peor tempestad económica del país, será uno de los descaros más recordados.
El rey Juan Carlos de Borbón, para redimir culpas y unirse a los recortes, anunció una rebaja voluntaria del 7 por ciento de su salario.
Pero los del Palacio de la Zarzuela no han sido los únicos, pues más de una familia de la nobleza ha acatado la moda de la austeridad.
Te presentamos a continuación un resumen de los ajustes a los bolsillos de algunas de las principales monarquías del Viejo Continente.
España
El sueldo de Juan Carlos como jefe del Estado se reducirá casi 26 mil dólares hasta ganar la nada despreciable suma de 334 mil dólares anuales. Su hijo el príncipe Felipe de Borbón, heredero de la corona, también verá recortado el salario en 12.300 dólares hasta tener un sueldo de 161 mil dólares.
La caída es del 7.1 por ciento, en línea con la reducción de salarios acordada para todos los ministros del gobierno en el último plan de ajuste del ejecutivo.
También bajarán las partidas destinadas a gastos de representación de la reina Sofía, la princesa Letizia Ortiz y las infantas Elena y Cristina de Borbón. Desde el año pasado, los empleados de la Casa Real viajan en clase económica. En total, la Casa Real espera ahorrar unos 130 mil dólares de su presupuesto. La partida pública consignada a la monarquía fue de 8.26 millones de euros (10.14 millones de dólares) para 2012, un 2 por ciento menos con respecto a 2011.
Se trata de los presupuestos más austeros de las casas reales de Europa.
Reino Unido
La reina Isabel es considerada una de las mujeres más ricas del mundo. Recientemente, la familia real británica ha abierto al público partes del palacio de Buckingham previo pago de una entrada. La idea es cumplir el reto de reducir el 25 por ciento el dinero público destinado a la institución monárquica.
La reina, que este año celebró su Jubileo de Diamantes tras cumplir 60 años en el trono, ha cortado el uso de fondos públicos, en línea con los duros ajustes del gobierno para reducir el déficit.
Se congeló el salario de los empleados y se hizo en hincapié en reducir los gastos de mantenimiento de algunos de los palacios y propiedades de la institución.
Sin embargo, los gastos en viajes siguieron aumentando, fundamentalmente porque la reina ha enviado a miembros de su familia a otros países para festejar el Jubileo. Según cifras oficiales, los británicos destinaron 32.1 millones de libras (49,5 millones de dólares) de sus impuestos a la monarquía en 2011, un 5.3 por ciento menos con respecto al año anterior.
Países Bajos
La reina Beatriz de Holanda, que reside en un palacio estatal en medio del campo a las afueras de La Haya, cobra un salario de 829 mil euros , casi un millón de dólares al año y recibe casi 6 millones de dólares para “gastos personales”.
El presupuesto de la institución holandesa, incluidos el príncipe heredero Guillermo Alejandro y su esposa, la argentina Máxima Zorreguieta, asciende a 39.2 millones de euros (48 millones de dólares), según las últimas cifras oficiales.
En este caso, la reina Beatriz ha reducido considerablemente sus gastos en viajes personales. Incluso recientemente puso 163 mil euros, unos 200 mil dólares de su propio bolsillo para arreglar su yate privado.
Bélgica
El rey Alberto II de Bélgica destinó parte de su salario a pagar el mantenimiento de sus propiedades.
En una inusual comparecencia pública en enero, anunció su intención de congelar los 10.8 millones de euros (13.8 millones) que recibe del Estado. El monarca dijo que su intención era aplicar en 2012 una subida automática de la inflación cercana al 3 por ciento.
Aunque parece una cantidad pequeña, el gesto también fue bienvenido en tiempos de crisis.
A finales del año pasado, el Ministro de Finanzas belga señaló que para febrero de este año “habría que tomar medidas serias, y todo aquel que diga que no se sentirán, se equivoca”. Al parecer el mensaje iba en serio, pues la familia real no pudo sortear la ola de ajustes.
Las excepciones
Noruega, uno de los países más ricos de Europa por renta per cápita, no ha reducido el presupuesto de su familia real.
Tampoco lo ha hecho Suecia ni Dinamarca. De hecho, los países escandinavos, que no usan el euro, han quedado relativamente al margen de la crisis de europea de deuda.