La expresidenta Cristina Fernández involucró ayer a funcionarios del actual gobierno de Mauricio Macri como parte de la operatoria con dólar futuro del Banco Central que le causó millonarias pérdidas al Estado y por la cual ella misma está imputada.
En un escrito presentado al juez federal Claudio Bonadío, quien lleva adelante la investigación por el delito de fraude al Estado, y publicado a través de Internet, Fernández denunció a José María Torello, jefe de asesores del actual presidente; Gustavo Lopetegui, secretario de Coordinación de Políticas, y Eduardo Quintana, secretario de Coordinación Interministerial, como “supuestos beneficiarios ilícitos de la compra de dólar a futuro”.
En el mismo documento, Fernández manifestó tener la sospecha de que el juez Bonadío dictará su procesamiento en forma inminente y que por ello “resulta apropiado que quede una prueba concreta más de la manera ilegal sobre cómo se desarrolla este proceso”.
El magistrado considera a la expresidenta partícipe de una maniobra por la cual el Banco Central ofreció dólares a un precio mucho más bajo que el valor de mercado para entregar el 31 de marzo, bajo un nuevo gobierno. Según el juez, esto le causó al Estado una pérdida de unos 77 millones de pesos (unos 5 mil 273 millones de dólares al cambio actual). (AP)