Con el objetivo de demandar la liberación de los detenidos en julio durante la ola de protestas contra el Gobierno de Cuba, así como una ampliación de los derechos humanos y un diálogo nacional, el dramaturgo Yunior García y un grupo de jóvenes activistas convocaron a una marcha para el día de ayer.
Lo anterior, mientras Cuba se preparaba para reabrir aeropuertos, hoteles, comercios y que la mitad restante de la población estudiantil retome las clases presenciales después de 20 meses de restricciones por el COVID-19.
Algunos activistas que hicieron pública su idea de manifestarse, sobre todo los coordinadores de las protestas, informaron que recibieron citatorios de la policía días previos a la manifestación, y que grupos a favor del Gobierno que encabeza Miguel Díaz-Canel les impidieron salir de sus casas.
De acuerdo con The Associated Press (AP), en La Habana, el cruce de las calles Prado y Malecón —el punto acordado de concentración— lució tranquiló y con un moderado control policial. Mientras que diversos usuarios de redes sociales compartieron fotografías de ellos vestidos de blanco y con flores en las manos como forma de protesta.
La manifestación fue convocada por García y su grupo Archipiélago, un foro de debate en internet que cuenta con 35 mil miembros.
Hace apenas dos meses, los organizadores solicitaron un permiso para realizar la marcha, primero en La Habana y después en varias ciudades más, pero fue rechazado por las autoridades al considerarla ilegal y anticonstitucional.
Asimismo, la fiscalía advirtió recientemente que serán encarcelados quienes asistieran a la manifestación.
Por lo que los organizadores pidieron a las personas que no pudieran salir, colocar sábanas o prendas blancas en sus hogares, aplaudir a las 3:00 de la tarde (hora prevista de la marcha) o sonar cacerolas. Ninguna de estas últimas acciones se llevó a cabo, de acuerdo con medios locales.
En su lugar, plazas y parques fueron tomados por grupos de simpatizantes del Gobierno para realizar actividades culturales que dieran la bienvenida a la reapertura del país y lo que se espera sea una etapa de mayor flexibilidad en las medidas contra el COVID-19. Además, para conmemorar los 502 años de la fundación de La Habana.
Las autoridades acusaron a García y a Archipiélago de estar financiados y formar parte de un plan de Estados Unidos y grupos de interés de Florida para “destruir a la revolución” en el marco de una creciente hostilidad desde Washington para presionar un cambio de modelo político.
Por la mañana, el presidente Miguel Díaz-Canel inauguró el reinicio del curso escolar en todo el país, con lo cual unos 700 mil niños de primaria retomaron sus clases. Las semanas pasadas un número similar de alumnos de los otros niveles educativos habían regresado ya a las aulas.
Cabe mencionar que Cuba es la única nación de América Latina que cuenta con vacunas de producción nacional —Abdala, Soberana Plus y Soberana 02— que también se han exportado a Irán, Venezuela, Nicaragua y Vietnam. Las autoridades informaron que más de ocho millones de personas, incluidos niños a partir de los dos años, ya fueron inmunizados con un esquema completo de tres dosis.