¿Caníbales en París? Arrestan a tres hombres por comer carne humana

La policía les acusa de los cargos recogidos en las leyes francesas de “violencia voluntaria, actos de barbarie, antropofagia y mutilación permanente”

No existe un registro que pueda aclarar con exactitud cuando es que el ser humano comenzó a tener conductas antropófogas. Tampoco se sabe si la costumbre de comer carne humana tuvo su origen como una forma de combatir la hambruna o lo hacían por gusto.

Lo que sí se sabe, gracias al análisis de restos humanos encontrados, es que el canibalismo estuvo presente en gran parte de los asentamientos humanos de todo el mundo.

En Europa, las primeras huellas del canibalismo datan de hace más de 800 mil años; investigadores hallaron restos de Homo Antecessor en La Gran Dolina, España, cuyos huesos tenían señales haber sufrido conductas antropófogas por parte de sus compañeros.

El comer carne humana hoy en día es una práctica que suele verse con extrañeza y repulsión, reservada para tribus de salvajes que no han alcanzado el nivel de civilización que predomina al mundo. Sin embargo, esto no es impedimento para que el canibalismo se practique incñuso en ciudades tan populares como París, en Francia.

Agentes de la policía francesa detuvieron a tres sujetos por haber mutilado a un hombre para, posteriormente comerse algunas de sus partes.
Los hechos ocurrieron luego de una disputa entre los tres hombres detenidos con el individuo, cuya identidad no fue precisada, por un problema de dinero.

detienen a tres hombres acusados de canibalismo en francia

En el transcurso de la pelea, los agresores le mordieron el labio inferior de la boca y la oreja izquierda y le arrancaron pedazos de carne. De acuerdo a los investigadores del caso, los agresores “comieron” los trozos de carne que le arrancaron al agredido.

De acuerdo al diario Le Parisien, los tres individuos fueron detenidos la noche del domingo en el poblado de Clichy-sous-Bois, afuera de París, por haber agredido a un hombre y haberle comido parte de una oreja y de los labios.

La policía les acusa de los cargos recogidos en las leyes francesas de “violencia voluntaria, actos de barbarie, antropofagia y mutilación permanente”.

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