El ‘affaire’ es lo de menos
E l presidente galo Francois Hollande no solo da tropiezos en la vida política. Su infidelidad se ha convertido en una telenovela que podría involucrar a la mafia de Córcega y poner en riesgo la seguridad del país.
Hollande desató las críticas sobre su incapacidad para gobernar al acaparar el viernes pasado la portada de la revista francesa de chismes Closer, que muestra fotografías que revelan el supuesto romance que sostiene el mandatario con la actriz Julie .
Pedro Pablo Cortéshttps://www.youtube.com/watch?v=UFgiQkBTNzk
E l presidente galo Francois Hollande no solo da tropiezos en la vida política. Su infidelidad se ha convertido en una telenovela que podría involucrar a la mafia de Córcega y poner en riesgo la seguridad del país.
Hollande desató las críticas sobre su incapacidad para gobernar al acaparar el viernes pasado la portada de la revista francesa de chismes Closer, que muestra fotografías que revelan el supuesto romance que sostiene el mandatario con la actriz Julie .
El tabloide realizó un reportaje de siete páginas titulado “El amor secreto del presidente”, en el que afirma que Hollande suele escapar de la residencia presidencial, donde vive con su novia Valerie Trierweiler, para pasar algunas noches con su amante.
Sin negar las acusaciones, el mandatario socialista emitió un comunicado tras conocer la publicación en el que condena la “falta de respeto a la vida privada” y anuncia que analizará las acciones legales y judiciales que puede tomar contra el medio, informó L’Express.
Los editores de la revista argumentaron que el asunto es de interés público porque demuestran que Hollande, quien enfrenta una crisis de popularidad, está deprimido y ha arriesgado la seguridad nacional.
Escándalo mafioso
El departamento de Gayet, donde el presidente y la actriz sostenían sus encuentros, está ubicado a unas calles del palacio presidencial, en la Rue du Cirque, y presuntamente es rentado por integrantes de la mafia de Córcega, lo que se ha vuelto una de las claves del escándalo.
La amiga que le prestó el apartamento a Julie Gayet, la actriz Emmanuelle Hauck, ha sostenido relaciones amorosas con dos miembros de la mafia de la isla de Córcega, reveló ayer el diario digital francés de Mediapart.
Hauck se divorció hace seis años del actor Michel Ferracci, quien en noviembre pasado fue sentenciado a 18 meses de prisión por abuso de confianza en el proceso del Círculo Wagram, red de contrabandistas ligada a la mafia Brisa de Mar.
Después de la separación, Hauck se relacionó con el corso Francois Masini, quien fue asesinado a balazos en mayo pasado en un ajuste de cuentas.
“Todo esto es desastroso para la imagen de la función presidencial. Basta leer los encabezados de la prensa internacional”, declaró el domingo a la cadena France 5 Jean Francois Copé, presidente del partido de oposición Unión por un Movimiento Popular.
La infidelidad no es el problema
Para los franceses, un pueblo conocido por su mentalidad abierta a la infidelidad, el affaire no es el problema.
El 84 por ciento de los franceses aseguran que la relación secreta del mandatario no afecta la imagen que tenían de él, y 77 por ciento mencionan que es un asunto privado que solo le concierne a él, revela una encuesta del periódico Journal du Dimanche.
Pero la controversia ha evidenciado las fallas de seguridad del Estado y la falta de gobernabilidad de Hollande, considerado el presidente más impopular de la historia de Francia, con apenas 26 por ciento de aprobación en lo que va de enero, informa Reuters.
Los paparazzi aseveraron a los medios que no tuvieron problemas para rentar un departamento frente al de la actriz, y desde ahí monitorearon todos sus movimientos, pese a las escoltas del mandatario.
“Estos policías no preguntaron sobre el pasado del dueño o rentero del apartamento, ni de sus vínculos con individuos de perfil sospechoso. Ni siquiera supieron darse cuenta de los paparazzi que seguían a Francois Hollande”, publicó ayer Le Monde.
La primera dama, Valerie Treirweiler, estuvo internada en el hospital el fin de semana por un ataque de estrés que, según la prensa francesa, se debe al escándalo de infidelidad.
Se espera que Hollande aclare los hechos en la conferencia de prensa que ofrecerá hoy, aunque algunos expertos señalan que la verdad podría hundirlo aún más.
“Debe hacer como si este affaire no existiera. La popularidad del (expresidente) Sarkozy bajó en las encuestas cuando habló de su historia de amor con Carla (Bruni). Hollande debe desligarse”, publicó ayer el diario Le Figaro.
Mandatarios infieles
Aunque en países como México, un escándalo de infidelidad podría sacudir a la nación entera y despertar la indignación del pueblo, en Francia muchos presidentes han tenido amantes sin mayor problema.
“Que un presidente francés tenga relaciones extramaritales, o más de una compañera sentimental, no es nada nuevo ni controvertido en esa cultura”, publicó ayer BBC Mundo.
El predecesor de Francois Hollande, el expresidente Nicolas Sarkozy, y su esposa Carla Bruni estuvieron envueltos en rumores de infidelidad mutua durante gran parte de su gestión.
Además, la revista Le Nouvel Observateur reveló mensajes de texto que Sarkozy envió a su exesposa antes de casarse con Bruni. “Si regresas, anulo todo”, decía uno de ellos.
Antes de Sarkozy, el presidente Jacques Chirac también libró bien el escándalo que provocó su esposa Bernadette Chirac, quien contó a un periodista que estaba celosa por todas las infidelidades de su marido.
Otros mandatarios que también tuvieron amantes conocidas públicamente fueron Francois Miterrand, quien gobernó en 1981, y Georges Pompidou, en 1969.