El lado chino de la luna
El expansionismo chino no oculta sus ambiciones. China anunció planes para enviar la primera misión espacial a la cara oculta de la Luna, lo que sería una primicia mundial en la carrera por la conquista del espacio.
Dicho hemisferio, imposible de ver desde la Tierra, ha sido fotografiado varias veces desde 1959, pero jamás ha sido explorado.
La sonda Chang’e-4 – nombrada así en referencia a la diosa de la luna en la mitología china – va a ser enviada en el año 2018, de acuerdo a Liu Jizhong, jefe de la misión de exploración lunar.
Andrea Montes Renaud
El expansionismo chino no oculta sus ambiciones. China anunció planes para enviar la primera misión espacial a la cara oculta de la Luna, lo que sería una primicia mundial en la carrera por la conquista del espacio.
Dicho hemisferio, imposible de ver desde la Tierra, ha sido fotografiado varias veces desde 1959, pero jamás ha sido explorado.
La sonda Chang’e-4 – nombrada así en referencia a la diosa de la luna en la mitología china – va a ser enviada en el año 2018, de acuerdo a Liu Jizhong, jefe de la misión de exploración lunar.
En esta carrera por conquistar el espacio, China deberá gastar miles de millones de dólares para el envío y su coordinación desde la Tierra, pero esto también representa una clara señal de la fuerza que tiene el Partido Comunista.
Los avances del programa espacial de China han sido una prioridad para los líderes del partido comunista, y especialmente bajo el mandato del presidente Xi Jinping que busca establecerse como una potencia espacial.
A principios del 2015, China envió una carta a la comunidad internacional para crear un programa de cooperación entre las potencias espaciales, y aunque insiste en que este programa es para fines pacíficos, el Departamento de Defensa de Estados Unidos ha puesto en evidencia las capacidades espaciales de China, y sus intenciones para establecer una base en el espacio para ser utilizada en caso de una crisis.
La ‘diosa’ de la luna
En 2013, la misión Chang’e-3 ya había permitido a los chinos realizar un alunizaje y recolectar muestras de la superficie lunar para su estudio.
La misión Chang’e-4 será similar, pero con una capacidad mayor para el transporte de una carga más grande esta vez del lado oculto de la Luna, que por primera vez en la historia podrá dar lugar al estudio geológico de esa misteriosa región.
Existe una tercera misión, Chang’e-5, que irá aún más lejos al intentar asegurar su estancia en la órbita lunar para realizar alunizajes más frecuentes, pero sobre todo, mejorar sus viajes de trasportación a la Tierra, lo que preparará la futura misión para la colonización humana en la Luna.