En Venezuela la cosa está que arde. O al menos así lo proyecta la oposición.
El líder opositor Henrique Capriles afirmó ayer que el país enfrenta una emergencia económica, y propuso un incremento general de salarios de 50 por ciento y una unificación cambiaria como parte de un paquete de medidas para evitar una situación de explosión en el país.
“Es una emergencia la que hay hoy en Venezuela”, afirmó Capriles al responsabilizar al presidente Nicolás Maduro de la crisis económica en el país, y dijo a la prensa que de no tomarse correctivos en breve tiempo se corre el riesgo que se derive a una “situación explosiva”.
Inflación y escasez
Venezuela enfrenta una compleja situación económica caracterizada por una galopante inflación, severos problemas de escasez de productos básicos y una recesión que los analistas prevén que podría agravarse este año por la caída de los precios del petróleo que genera 96 por ciento de los ingresos que recibe el país por exportaciones.
Capriles, gobernador del estado central de Miranda, planteó un incremento general de salarios de 50 por ciento para los empleados públicos y privado para tratar de paliar los impactos de la desbordada inflación que sostuvo que habría alcanzado en junio una tasa de 74 por ciento.
Para enfrentar el problema de la escasez, Capriles propuso que se debe revertir las expropiaciones de unas 293 empresas del sector alimento y regresarlas a sus propietarios o trabajadores.
(Fuente: AP)