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Miles de personas se reunieron en la plaza central de Madrid para manifestarse en contra del gobierno regional de Cataluña, por el impulso para sostener un referendo sobre la independencia de la región de España.
La política se mezclará con el fútbol el domingo cuando Barcelona será algo más que un club de fútbol para los separatistas de Cataluña.
Este domingo 1 de octubre, grupos separatistas por parte de Cataluña buscan celebrar de manera independiente una votación para decidir si permanecen dentro de España. Esta votación ya había tenido lugar en 2014, pero no fue validada por las autoridades nacionales.
Las organizaciones de base que impulsan el movimiento separatista catalán desafiaron hace una semana a las autoridades españolas al repartir un millón de papeletas para el referéndum independentista del 1 de octubre, que el gobierno central en Madrid ha calificado de ilegal y que ha prometido impedir.
Los separatistas catalanes han insistido en que realizarán el referéndum independientemente de los deseos del gobierno central y el domingo se reunieron por miles en las plazas públicas de Barcelona y otras ciudades de la región. Muchos portaban banderas catalanas y carteles a favor de la consulta independentista y juraban que declararán la independencia si el “Sí” gana.
Las tensiones se incrementaron en todo el país por el controversial plebiscito. En Madrid, miles se manifestaron en contra de los separatistas que intentan romper su nación. Demandaron que los líderes catalanes del movimiento fueran enviados a prisión.
La policía ha recibido instrucciones de impedir que se vote el domingo y en los últimos días ha confiscado papeletas y publicidad.
El gobierno catalán ha afirmado que seguirá adelante de todos modos y ha instado a los 5.3 millones de votantes registrados en la región a que participen.
Un alto funcionario español de seguridad en Cataluña dijo que la policía ya había clausurado más de la mitad de las 2.315 escuelas que servían como centros de votación y que desmanteló un software que se iba a utilizar en el referendo.
Enric Millo el funcionario español más importante en la región del noreste, ha advertido que las autoridades no permitirán la celebración del referéndum como prometieron.
“Siempre se puede poner una mesa en la calle, con algunas cubetas y papeles dentro”, dijo. “Pero lo que las autoridades catalanas han prometido es un referendo efectivo con garantías legales y vinculante, eso es algo que hoy podemos asegurar que no se va a celebrar”, agregó el funcionario.
Trump, a favor de la unidad
El presidente estadounidense Donald Trump dijo el martes que España debería de quedarse unida y calificó de “tonto” el referendo independentista que ha programado el gobierno regional de Cataluña.
“Creo que España es un gran país y debe de permanecer unido”, dijo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump en una conferencia de prensa luego de reunirse con su homólogo español Mariano Rajoy en la Casa Blanca. “Estamos hablando de un gran, gran país y debe de permanecer unido”.
El jefe de gobierno español, entre tanto, calificó la situación de “disparate” y dijo que el referendo no puede realizarse porque nadie en el gobierno catalán lo está organizando. Agregó que el asunto está causando división y aumentando las tensiones en España.
Con información de AP.