Estado de emergencia por desempleo
En Francia, las cifras hablan por sí solas y son abrumadoras. Entre mayo de 2012 y noviembre 2015, el número de desempleados en las áreas metropolitanas de Francia aumentó a 652 mil 700 y más de un millón de personas buscan un empleo adicional por una reducción en su actual actividad laboral.
“Francois Hollande perdió la batalla. No sólo por no poder revertir la curva de los desempleados, sino por mostrar su impotencia” aseguró el diario francés Le Monde.
Andrea Montes Renaud
En Francia, las cifras hablan por sí solas y son abrumadoras. Entre mayo de 2012 y noviembre 2015, el número de desempleados en las áreas metropolitanas de Francia aumentó a 652 mil 700 y más de un millón de personas buscan un empleo adicional por una reducción en su actual actividad laboral.
“Francois Hollande perdió la batalla. No sólo por no poder revertir la curva de los desempleados, sino por mostrar su impotencia” aseguró el diario francés Le Monde.
Hollande presentó un plan al que llamó una “última oportunidad” para tratar de impulsar el empleo. Su costo será de 2 mil millones de euros.
Según especialistas, el estado de emergencia económica y social que proclamó el presidente ante el Consejo Económico, Social y Medioambiental (CESE), podría – y debería – haber sido decretado desde el comienzo de su mandato.
Ahora, a 16 meses de la recta final de su administración, François Hollande declaró a Francia de nuevo en estado de emergencia, esta vez económica, tras alcanzarse los niveles más altos de desempleo jamás vividos en el país.
Los críticos inmediatamente asumieron que estas medidas obedecían a un plan, más político que económico.
Francia, a pesar de ser la segunda mayor economía de la zona euro, después de Alemania, ha luchado para recuperarse de la recesión que afectó a gran parte de Europa después de la crisis financiera mundial del 2008.
Por su parte, Hollande se ha comprometido a ir “hasta las últimas consecuencias” para reformar a su país.
En efecto, el presidente, que comienza su último año, ha declarado en repetidas ocasiones que frenar esta curva de desempleo determinará su candidatura para una posible reelección en 2017.
No obstante, desde su elección en 2012, hay 650 mil desempleados más. Y a pesar de una pequeña disminución, hay más de 3,5 millones de solicitantes de empleo que no tuvieron ninguna actividad en noviembre, de acuerdo con las últimas cifras dadas por la Oficina de Empleo.
Después de las elecciones regionales del 6 y 13 de diciembre, el sistema actual está sin aliento.
No sólo porque el Frente Nacional registró un aumento histórico en los votos durante la primera ronda, y nuevos adscritos en la segunda, sino porque el Estado francés aún se encuentra en estado de emergencia por los ataques terroristas del 13 de noviembre, y ahora en estado de emergencia económica debido a los niveles de desempleo masivo que atacan al país.
Desempleo, un problema mundial
Cada año – con la publicación del informe sobre el empleo en el mundo – la Organización Internacional del Trabajo (OIT) alerta sobre la gravedad y la duración de la crisis económica, y las cifras de nuevos desempleados.
En vano, la situación apenas cambia. La edición 2016, publicada recientemente en Ginebra, predijo un aumento de alrededor de 2,3 millones de desempleados para el 2016, para alcanzar, a finales del año, el umbral de los 200 millones de personas, es decir: 30 millones más que antes de la crisis en 2007.