Una corte de Estados Unidos acusó ayer a dos sobrinos de la primera dama de Venezuela Cilia Flores de confabularse para introducir 800 kilogramos de cocaína a ese país.
Un tribunal federal de Manhattan presentó los cargos contra Efraín Campos y Francisco Flores por participar en reuniones en Venezuela para discutir un embarque de cocaína a Estados Unidos a través de Honduras.
El caso de los jóvenes, que se espera que comparezcan ante esa corte la próxima semana, podría exacerbar las ya tensas relaciones entre Estados Unidos y Venezuela y refuerza las acusaciones estadounidenses de narcotráfico en los más altos niveles del gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro.
La detención se produjo tres semanas antes de las cruciales elecciones legislativas, que según los sondeos podrían asestar al partido en el gobierno su peor derrota en 16 años, en medio de una inflación de tres dígitos y una escasez generalizada de productos en Venezuela.
Presión constante
Fiscales estadounidenses han aumentado de forma gradual la presión sobre altos miembros de las fuerzas armadas, la policía y el gobierno de Venezuela por su presunto papel en hacer del país una importante zona de tránsito de narcóticos rumbo a Estados Unidos y Europa. El gobierno estadounidense dice que más de 200 toneladas de cocaína pasan cada año por Venezuela. (Fuente: AP)