La reina Isabel II de Inglaterra fue captada en una grabación describiendo a funcionarios chinos como “muy groseros con el embajador” durante una conversación con un mando policial, durante un acto en el Palacio de Buckingham.
Las declaraciones, que fueron realizadas el martes, son poco habituales en la monarca de 90 años, que ha sido muy cauta para mantenerse alejada de la política durante su largo reinado y a los medios que la acompañan se les pide que no registren conversaciones privadas.
La grabación, realizada por un cámara oficial de Palacio durante la fiesta del jardín, recoge cómo la comandante de la policía Lucy D’Orsi dice a la reina que preparar la visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Gran Bretaña en octubre había sido un “momento complicado”.
Isabel II le responde: “Fueron muy groseros con el embajador”.
Éste fue el segundo incidente embarazoso de la jornada en un palacio, ya que el primer ministro británico, David Cameron, fue sorprendido en otro evento describiendo a Nigeria y Afganistán como “posiblemente los dos países más corruptos del mundo”.
Ésta no es la primera vez que miembros de la familia real británica son sorprendidos realizando declaraciones poco diplomáticas sobre los chinos. El príncipe Carlos describió a todos los responsables chinos como “figuras de cera terriblemente viejas” en una entrada en un diario privado en la que describía la ceremonia de 1997 en la que se devolvía la soberanía de Hong Kong al gobierno chino. (AP)