Feliz sin el presidente

Luego de que el presidente Francois Hollande anunciara su ruptura, la exprimera dama de Francia, Valerie Trierweiler, rompió ayer el silencio.

La periodista, quien fue pareja de Hollande por casi 10 años, enfrentó los cuestionamientos de los medios sobre su vida privada durante un viaje humanitario a un hospital de niños enfermos en Mumbai, India.

Aunque no hizo referencia al escándalo que protagonizó el mandatario por haberle sido infiel con la actriz Julie Gayet, Trierweiler dijo que se sentía feliz y que era labor de los franceses juzgar al presidente.

“Por ahora no estoy planeando nada. En cualquier caso, no se preocupen por mí”, respondió a los medios sobre sus futuros planes.

“No sé si me corresponde a mí juzgar, o a ustedes”, añadió.

En París, los franceses están criticando con mano dura a Hollande, pero no por sus amoríos, sino por los problemas económicos en los que ha sumido al país.

El fin de semana, cerca de 20 mil manifestantes se reunieron en la capital para exigir la renuncia del mandatario, quien no ha hecho público si sigue su relación sentimental con Gayet.