Después del gobernador de Nueva York, el presidente de la legislatura estatal, Sheldon Silver, era la figura política más poderosa del estado. Pero ayer su suerte cambió.
Silver fue detenido ayer y acusado de aprovechar su cargo para cobrar millones de dólares en sobornos y hacerlos pasar por ingresos legítimos.
El político de 70 años fue arrestado a las 8 de la mañana en la oficina neoyorquina del FBI y debe responder a cargos de soborno y asociación delictiva, entre otros, que conllevan una pena posible de 100 años de prisión.
En la denuncia penal, las autoridades dijeron que Silver abusó de su poder y “obtuvo unos 4 millones de dólares en pagos registrados como honorarios de abogado mediante el uso corrupto de su posición oficial”.
El responsable de la investigación, el fiscal federal Preet Bharara acusó a Silver de haberse enriquecido con su poder “titánico”.
¿Actuó solo?
El arresto provocó estupor en el Capitolio neoyorquino, pues la comisión y Bharara se dedicaron a investigar las ganancias de los legisladores aparte de sus sueldos. (Fuente: AP)