La oposición venezolana sigue de pie. El presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, presentó ayer el “Plan País”, con el que pretende solucionar la crisis económica.
“Este plan no busca apretar más a esta nación; lo que busca es reactivarla y recuperarla. Es un proyecto en el que hemos trabajado desde hace muchos años y es el resultado de la suma de muchos esfuerzos. Es algo bien pensado”, declaró Guaidó en la Universidad Central de Venezuela.
El político prometió, entre otros puntos, buscar inversiones para volver a llevar fondos a su país, y llamó especialmente a los gobiernos de China y Rusia, naciones que demostraron su apoyo a Nicolás Maduro, a negociar y buscar oportunidades.
También prometió crear empleos, estabilizar la inflación y reactivar la industria petrolera. Reiteró, además, que el plan opositor tiene tres etapas: la primera es un cese a la usurpación, en referencia al segundo mandato del político chavista, Nicolás Maduro; crear un gobierno de transición, que encabezaría el mismo Guaidó, y la realización de elecciones libres y democráticas.
Respecto a la industria petrolera, buscará garantizar la seguridad de las instalaciones, evitar su desmantelamiento, recontratar al personal despedido, en especial aquel afectado en el 2002. Para recuperar Petróleos de Venezuela (PDVSA) indicó que son necesarios más de 25 mil millones de dólares, los cuales se podrían atraer de la inversión extranjera.
Denuncia peligro
Durante la presentación de su plan para atender la emergencia social y política, Juan Guaidó denunció un nuevo acto de intimidación y persecución del régimen chavista.
“En este momento la FAES (Fuerza de Acciones Especiales de la Policía Nacional) está en mi domicilio, en mi casa familiar. Hago responsable al ciudadano Nicolás Maduro por la integridad de mi hija que allí se encuentra”, dijo el opositor.
Guaidó detalló que cuatro funcionarios policiales se acercaron en dos motos y una camioneta sin matrícula y preguntaron por su esposa, Fabiana Rosales.