Hasta Rusia por Snowden
Si algo está claro es que el gobierno brasileño no se quedará de brazos cruzados hasta llegar al fondo de las acusaciones por presunto espionaje por parte del gobierno estadounidense.
En los últimos días, tanto la presidenta Dilma Rousseff como Petrobras fueron señalados por The Guardian y O Globo como “blanco directo” de la Agencia de Seguridad Nacional de EU (NSA, por sus siglas en inglés), y los legisladores de Brasil creen que escuchar el testimonio de Edward Snowden podría llevarlos al fondo del asunto.
Indigo StaffSi algo está claro es que el gobierno brasileño no se quedará de brazos cruzados hasta llegar al fondo de las acusaciones por presunto espionaje por parte del gobierno estadounidense.
En los últimos días, tanto la presidenta Dilma Rousseff como Petrobras fueron señalados por The Guardian y O Globo como “blanco directo” de la Agencia de Seguridad Nacional de EU (NSA, por sus siglas en inglés), y los legisladores de Brasil creen que escuchar el testimonio de Edward Snowden podría llevarlos al fondo del asunto.
Ayer, una comisión de la Cámara de Diputados aprobó el envío de una delegación a la capital rusa para entrevistar al excontratista de la NSA, quien reveló el esquema de espionaje internacional de EU.
La comisión de Relaciones Exteriores y Defensa acogió la propuesta del diputado Ivan Valente de enviar un grupo de legisladores a Moscú, donde Snowden se encuentra asilado, para conversar con él sobre la intercepción de comunicaciones electrónicas.
Intereses económicos
Al citar publicaciones de que la NSA también espió a Petrobras, Valente señaló que ese hecho “revela el fuerte interés económico de Estados Unidos en sectores estratégicos de la economía brasileña”.
Autoridades de Washington argumentaron que su programa tenía el propósito de combatir el terrorismo, pero el gobierno brasileño alegó que el espionaje a la petrolera revelaría intereses económicos porque la empresa no tiene vinculación con actos terroristas.
(Fuente: AP)