¡No es broma! En un intento por apoyar económicamente la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de construir un muro entre su nación y México, la legisladora republicana Gail Griffin propuso que los productores de móviles, tabletas, ordenadores y hasta televisiones coloquen un dispositivo especial para detectar a consumidores de pornografía y cobrarles un impuesto.
En la polémica propuesta, la cual puede ser leída AQUÍ, se establece que cada consumidor de porno deberá pagar 20 dólares, que se utilizarán para costear programas de apoyos sociales y de prevención a víctimas de trata pero también para construir el muro fronterizo.
El plan es sencillo… según la legisladora, todos los productores de los aparatos arriba descritos deberán colocar un chip, o algo, que bloqueé automáticamente el ingreso a cualquier plataforma digital que ofrezca pornografía. Si el usuario así lo desea puede desbloquear su aparato pagando 20 dólares que irán a dar a las arcas del Gobierno de Arizona, que así colaboraría con la obra propuesta por Trump.
Griffin fue más allá al proponer que los fabricantes impongan otro impuesto, el que ellos quieran, para desbloquear los aparatos para que se lleven algo de ganancia, pero también los amenazó con declararlos culpables de un delito menor de clase 1 si se niegan a acatar la norma que está por debatirse.
Los delitos menores de clase 1 se pagan con seis meses de cárcel y multas de hasta 2 mil 500 dólares.
Es de esperarse que la propuesta no sea aprobada por el pleno pues en 18 estados se ha intentado cobrar alguna clase de impuesto estatal a los consumidores de pornografía pero en ninguno se ha logrado el éxito. Cabe mencionar que en Estados Unidos los productores de este tipo de contenido pagan altos impuestos.
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