Joven y revolucionario
Él no tiene edad para manejar, para tomar o siquiera para votar, pero Joshua Wong es la llamada “cara de las protestas”, la “voz de una generación” en Hong Kong.
El joven ha sido foco de atención en las manifestaciones que se han llevado a cabo en la excolonia británica para exigir la democracia al Gobierno chino.
Las protestas iniciaron a inicios de septiembre tras la reciente decisión de la Administración de Xi Jinping de quebrantar su promesa de permitir unas elecciones totalmente democráticas en la zona.
Indigo StaffÉl no tiene edad para manejar, para tomar o siquiera para votar, pero Joshua Wong es la llamada “cara de las protestas”, la “voz de una generación” en Hong Kong.
El joven ha sido foco de atención en las manifestaciones que se han llevado a cabo en la excolonia británica para exigir la democracia al Gobierno chino.
Las protestas iniciaron a inicios de septiembre tras la reciente decisión de la Administración de Xi Jinping de quebrantar su promesa de permitir unas elecciones totalmente democráticas en la zona.
Desde entonces, cientos de miles de estudiantes tomaron las calles de manera pacífica en lo que se ha convertido en la “revolución de los paraguas”.
Y uno de los líderes que ha movilizado a tal cantidad de personas es Wong, quien con apenas 17 años es ya un activista veterano.
Desde los 15 se involucró en las revoluciones prodemocracia en su país.
“Si Wong no se fía de la edad adulta, su querido hogar, Hong Kong, también se suspende en la adolescencia. La ciudad puede ser el corazón financiero de la región más dinámica del mundo, una colección de 7.2 millones de personas para las que el pragmatismo y la eficiencia son una fe de guía. Pero desde sus inicios como un pequeño puerto pesquero saqueado por los británicos de la dinastía Qing, a la entrega de la colonia china en 1997, Hong Kong nunca se ha permitido su madurez política”, informó Time el pasado 8 de octubre.
Pero a pesar de que la ciudad no ha logrado madurar, los jóvenes han tomado este papel de adultos y salieron a las calles para exigir sus derechos.
“La detención de Wong por 40 horas el pasado viernes, junto con otras personas de las que irrumpieron el complejo gubernamental bloqueado, empujó las protestas a gran escala y enfocó en él la atención mundial”, afirmó The Guardian el pasado primero de octubre.
Incluso, cuando esto no es de su total agrado. En el 2012, el joven indicó que “si los movimientos masivos se tornan en la adoración de una persona en particular, es un gran problema. No necesitan modelos a seguir para ser parte de un movimiento social mientras le importen los problemas”.
Así demuestra su forma de ser, un adolescente que a pesar de ser revolucionario es muy “moderado”.
“Es tan joven pero tan sabio que no se puede dejar de pasar un montón de tiempo con él… Él es el hijo de todas las madres: filial, educado, con principios, trabajador”, dijo Michael Vidler, el abogado que defendió a Wong tras su detención.
Y es que sus padres le han otorgado la libertad para defender lo que piensa, a pesar de que ni ellos mismos se involucran en la política.
“No son padres helicópteros y no me miman… Me han dado libertad, lo que le ha dado forma al Joshua Wong que soy ahora”, apuntó el joven de 17 años.