Después de que se develara el terrible negocio en el que incurre la empresa Sochinski Delfinari, con sede en Rusia, quien vendía a acuarios chinos belugas, orcas y hasta crías de morsa que se encuentran cautivas en la llamada cárcel de ballenas, autoridades les impusieron una multa millonaria que no fue bien vista por los dueños.
Un tribunal, con sede en Vladivostok, determinó multar a la empresa con 37.6 millones de rublos, (aproximadamente 11 millones de pesos) por la captura ilegal de 2 orcas, de las 11 que tienen.
La sentencia fue determinada después de que un juez la acusara de capturar a los cetáceos en un lugar prohibido y con técnicas y embarcaciones inadecuadas.
Ante lo que consideraron una multa injusta, los representantes legales de Sochinski Delfinari anunciaron que se ampararán ante instancias superiores pues, a su parecer, la llamada cárcel de ballenas es legal.
Un video, difundido por la agencia Efe, muestra las condiciones en la que viven las especies.
? La mayor cárcel de ballenas del mundo está en Rusia. Los grupos ecologistas exigen a Putin que fuerce la liberación de los animales, que viven en condiciones que ponen en riesgo su vida. pic.twitter.com/xv1q3EAPa5
— EFETV (@EFETV) 15 de marzo de 2019
En ella viven recluidas 87 belugas, 11 orcas y 11 crías de morsa esperando ser liberadas.
Aunque el lugar de reclusión de las especies ya fue cerrado y la venta a China prohibida, las especies aguardan su liberación, la cual supondrá, según el Instituto oceanográfico VNIRO de Rusia, un gasto de más de 3 millones de rublos (casi un millón de pesos).
Las mismas tendrán que ser trasladadas en recipientes especiales y ayudadas a adaptarse a su vida en libertad.
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