Este año fue significativo para Apple. Tuvo lanzamientos que dispararon las ventas con su iPhone 5 y el iPad Mini. Sin embargo, también tuvo fallas en aplicaciones como Apple Maps, y con ello un gran número de usuarios descontentos.
Eso dio pie a despidos en distintos departamentos y en la reorganización salió “la mano izquierda de Steve Jobs”, Scott Forstall, quien fuera jefe del software de Apple.
Su despido se debió a “cambios ejecutivos en la gestión que fomentan la colaboración mundial en cuanto al hardware, software y demás servicios”, según señalaba una carta oficial de la compañía ahora dirigida por Tim Cook.
Muchos fueron sorprendidos con esta salida, incluso el actual director de Palantir (y antiguo ingeniero de Apple) Michael Lopp dijo que cuando él estaba en la empresa e iba al Macs Caffe, siempre se decía que Forstall sería “el sucesor legítimo de Jobs”, en otras palabras, estaría al frente de todos los escuadrones.
En su lugar se quedó Sir Jonathan Ive, quien es reconocido por haber diseñado el distintivo hardware de Apple.
Un ex alto directivo de Apple señaló que Ive y Forstall “realmente nunca se agradaron entre sí ( ) Steve mantenía a todo el mundo en línea, pero sin Steve, se pusó peor y llegó a ser muy contraproducente. Hay que resaltar a Tim por esto”.
Esto prueba que las fuerzas bélicas de Apple tienen debilidades desde el interior y su ejército sufrió cambios que suponen serán la clave para el año en puerta.
Otra cabeza que rodó, pero no por ataques enemigos, sino por despido, fue la de Richard Williamson, el responsable de la nueva (y fallida) aplicación de Mapas en el iOS 6.
Apple Maps suplió a Google Maps en el más reciente sistema operativo, pero su deficiencia logró que Google Maps regresara y “contentara” a los usuarios, ganando territorio en esta guerra.
Eddy Cue, un veterano de la compañía de origen cubano, se quedó a cargo de Mapas y Siri. Cue también es el director de la App Store y de iTunes.
Creativos, pero…
De acuerdo con The Financial Times, Apple padece de la “maldición del 4 por ciento”, pues sus acciones perdieron 25 por ciento de su valor. Esto a pesar de haber subido notoriamente en el S&P, (Standard & Poor’s 500, por sus siglas en inglés).
Según expertos, esta empresa necesita de un lanzamiento que no se trate de “otra evolución” o reedición de sus productos y dispositivos ya conocidos y hasta dominados por la gran mayoría.
Y es que a pesar de que tiene un gran equipo creativo, innovador y tecnológico, la muerte de Steve Jobs sí afectó de manera contundente a la hora de desarrollar e innovar los servicios que ofrece esta reconocida compañía.
Se ha tratado de mantener el legado de Jobs y su ahora CEO, Tim Cook, ya informó que realizaron cambios estructurales (los despidos este año fueron uno de ellos), que se suman a las fallas en el iPhone 5, que fueron un golpe trascendental.
Aún así, su economía y valor como marca siguen casi intactos. No en vano Cook fue uno de los nominados a ser personaje de 2012 por la revista Time.
Pero en esta trinchera tecnológica, tanto las municiones como las armas ya son conocidas incluso por sus enemigos, y se acerca el momento en que Apple deba revolucionar conceptos y marcar eras, tal como sucedió con la experiencia de escuchar música con el iPod y la libertad en la sincronización entre el hardware y software en su sistema operativo, lo cual es destacable mencionar que modificó –y facilitó– la interacción con el usuario.
En febrero de este año, Apple se “coló” a la lista de las compañías con un capital del mercado que creció hasta representar el 4 por ciento del valor total de todo el S&P 500.
De hecho, su precio por acción llegó a ser de 702.10 dólares en septiembre pasado, siendo ese el punto máximo alcanzado.
Después cayó un 25 por ciento (una derrota en la guerra de las tecnologías), y perdió territorio dominado, como le sucedió en alguna ocasión a compañías como Microsoft y/o General Electric. De ahí la denominada “maldición del 4 por ciento”.
Algo muy parecido a lo que sucede con las carreras artísticas de algunas figuras del cine después de obtener el Óscar: se van en picada.
Esto puede deberse a que los inversores llegan a un límite y en determinado momento optan por disfrutar las ganancias obtenidas y alejarse por temor a los nuevos impuestos sobre dividendos y ganancias de capital, asegura The Financial Times.
Para expertos y uno que otro inversionista, Apple podría estar en la cúspide, pero se vendrá en picada y pasará de ser la que fuera la empresa de mayor valor en el mundo, a otra compañía más que deja el podio.
Y es que con el ascenso de dispositivos similares a los de Apple, pero de otras marcas, el campo de la innovación se aleja de la compañía, junto con el de la reinvención. Por lo menos la distinción que los caracterizaba ya la puede “obtener” cualquiera.
El pelotón que sigue intocable, y probablemente se vuelva la estrategia para sostener a este imperio tecnológico, está compuesto por la App Store y iTunes, los que en efecto no han sufrido de ataques directos y siguen muy por delante de la competencia.
La compañía espera –y cuenta– con que el iPhone genere alrededor de 80 millones de dólares de ingresos en el 2013, así como unos 30 millones de dólares en ventas de iPad.
Cifras que se ven jugosas y que podrían librar batallas y probablemente la guerra, pues se habla de millones de dólares en ventas. Sin embargo, las ganancias obtenidas han impedido que se puedan concentrar en la creación de nuevos productos, o al menos de algunos que marquen una era o revolucionen conceptos establecidos.
La compañía no está derrotada y las batallas que podría librar este año no lo alejarán de la contienda. Su estrategia radica en su modelo de negocio, que se traduce en la idea de atraer consumidores o clientes a su tienda, pues ahí encontrarán el dispositivo o gadget que es imprescindible tener.
Añadiendo la relación entre dispositivos y la facilidad de instalación de contenidos, ventajas para la preferencia del cliente.
La facilidad de resguardar la información, con el beneficio de que ésta se trasladará a cualquier dispositivo a través de “la nube” con iCloud (lanzado por el mismo Jobs en 2010), es un mecanismo de defensa clave contra el enemigo competidor, recordemos las palabras de Steve Jobs: “Vamos a degradar a la PC y a la Mac a ser solo un dispositivo (…) vamos a mover el centro digital hacia la nube”.
Sin embargo, con el lanzamiento del iOS 6 (el más nuevo sistema operativo), llegaron las áreas de oportunidad y las fallas en aplicaciones como Siri y Mapas.
A la par, cambios en el ejército y en la organización del mismo produjeron problemas en la adaptación de esta compañía.
Cambios que según dijo Tim Cook a Bloomberg Businessweek, son movimientos que “llevan la colaboración a un nivel totalmente diferente”.
También dijo a ese medio que, al igual que sus productos cuentan con la fórmula que compagina la mezcla entre servicios, hardware y software, su personal también debería de hacerlo.
Si Time nominó a Tim Cook –a quien califican de brillante e inteligente– para ser uno de los personajes del año 2012 es porque aún es prematuro saber de lo que es capaz y la visión que Jobs vio en él. Sin embargo, la competencia crece y el enemigo sigue al acecho.
Y aunque sus movimientos importantes se han basado en rediseños y relanzamientos, Cook lanzó nuevos productos en el pasado otoño, entre ellos la más nueva versión de iPhone, la iMac y el iPad.
Por la conquista del hardware y la Red
De acuerdo con una publicación reciente en The Wall Street Journal, cuatro fuerzas tecnológicas han ido invadiendo sus territorios respectivos durante años en esta guerra digital. Se trata de Apple, Google, Amazon y Facebook.
Los enfrentamientos seguirán en 2013 y los cuatro irán en búsqueda de dominar el territorio en Internet y el hardware.
Los imperios de Amazon y Google buscan la expansión y el aumento de la fidelidad de sus usuarios al invertir parte de sus apuestas al hardware. De esa manera, aumentarán el control sobre lo que ya tienen conquistado del software.
Al menos Google ya realizó una movida maestra al comprar Motorola Mobility, por 12 mil 500 millones de dólares, con eso abre la oportunidad para lanzar productos para Android y con ello, avanzar hacia el territorio que domina Apple con el iPhone.
Por su parte, el ejército de Amazon dio un gran paso con Kindle Fire, el cual buscará conquistar incluso el mercado de los smartphones.
La estrategia de invasión de Apple se distingue por Siri, servicio de voz que buscan mejorar en 2013.
Facebook realizó una jugada maestra e invirtió en armas tan potentes como lo es la expansión en las capacidades de búsqueda, es decir, sigue con la mira en el software.
Estrategias de defensa
Aunque lidera esta era bélica digital, Apple deberá reforzar su defensa y su estrategia de guerra.
De acuerdo a International Data Corporation –IDC, por sus siglas en inglés–, las ventas de smartphones de Apple, a nivel global, cayeron 23 por ciento en el primer trimestre del año, mientras que en el tercer trimestre bajaron 15 por ciento.
Y no solo en la venta de teléfonos inteligentes hace falta una estrategia eficaz, también en el frente de la venta de tablets, pues el terreno de Android avanza a pasos agigantados.
A pesar de eso, Apple todavía pisa tierra firme y su territorio está bien custodiado y este año se convirtió en la empresa más valiosa en la historia de Estados Unidos.
Pero como en toda guerra, un movimiento en falso y se pierden las batallas, así que Apple no debe confiarse, menos ahora que Tim Cook ha expresado su interés por planear la invasión al territorio de la televisión.
Enemigo al acecho
La televisión es un terreno que también tiene Google en la mira y su expansión no se queda ahí.
Este año entrante busca ampliar el control que ya tiene y que los servicios que ya ofrece sean accesibles a los usuarios, a pesar de las malas condiciones como lo serían una conexión deficiente a Internet.
Prueba de ello es el énfasis que planean implementar en “Google Wallet” (el futuro de los pagos electrónicos al ser este servicio la facilitación de un smartphone como cartera o billetera).
Fabricar tabletas, como la Nexus 7, dominar la industria de teléfonos inteligentes, hacer pactos con fuerzas como lo es la de Internet inalámbrico y desarrollar servicios para Android que puedan operar en dispositivos para los hogares, son algunos de sus planes estratégicos.
Su trinchera estará preparada para enemigos como Facebook y Amazon, que también operan principalmente en la Web.
Además, prepara la presentación oficial de “Glass”, una especie de anteojos o lentes con los que se puede navegar tal como si se estuviera en una computadora, y busca la asociación que sí supondría la revolución de una era: manufacturar con una automotriz el prototipo ya existente del auto que se conduce con el software desarrollado por Google.
El ejército de Google está armado y recargado para comenzar el 2013.
Por si fuera poco, lanzarán también el “Phone X”, dispositivo producto de su compra a Motorola.
Amazon también tiene su armamento y éste se caracteriza por el posible lanzamiento de un smartphone, basado en la experiencia de Kindle Fire HD y su tienda en línea. De ser así, no solo el iPhone de Apple podría perder terreno, también se verían “invadidas” compañías como Samsung, que también opera con Android y con quien ha tenido enfrentamientos legales significativos para ambas compañías.
A diferencia de sus competidores, la estrategia de Facebook radica (todavía) en el software, y eso desata la curiosidad tanto de usuarios como de otros frentes armados, de cuándo decidirán incursionar e invadir el territorio del hardware.
Tan solo son rumores, pero es posible que la compañía de Mark Zuckerberg lance un teléfono inteligente con HTC, por ejemplo.
Sin embargo, por ahora seguirán modificando y mejorando sus aplicaciones y servicios móviles. Además de respaldarse en el armamento llamado publicidad en línea.