La revolución rota

Venezuela vive momentos de tensión política y de una crisis social cada vez más visible.

Los últimos episodios de desabasto se unen a los enfrentamientos generados entre la oposición y el oficialismo, producto del cerrado resultado de las pasadas elecciones presidenciales del 14 de abril.

“En Venezuela, se sabía que Hugo Chávez iba gobernar hasta el fin de sus días, por su carácter, por su gobierno autoritario”, comentó el activista y documentalista venezolano Marco Bell en una entrevista para Reporte Indigo.

Bell fue miembro del Comando Simón Bolívar, grupo de apoyo a la campaña del excandidato de oposición a la presidencia Henrique Capriles.

Calificó el mandato de Chávez como “una dictadura disfrazada de democracia, un secuestro a todos los poderes públicos, todos los poderes puestos en una persona”.

El artista visual describió el sentir de gran parte de quienes apoyaron a Capriles, después de que Tibisay Lucena, rectora del Consejo Nacional Electoral, anunció al ganador.

Aquel fatídico –para la oposición– domingo 14 de abril del presente año, Lucena anunció la cerrada victoria del oficialista Nicolás Maduro sobre el exgobernador de Miranda por apenas 1.59 puntos de diferencia.

“Yo me siento estafado, siento que vulneraron todos mis derechos como venezolano (ese día) porque fue un proceso electoral vergonzoso. Fue un robo, un arrebatón, y lo puedo decir con toda propiedad”, consideró Bell.

“Maduro y su combo hicieron todas las trampas y abusaron de los recursos del Estado. El país está en manos de unos mafiosos, unos delincuentes”, sentenció.

La crisis política en Venezuela se desató posterior al deceso del expresidente cuya administración duró 14 años.

“Como bien lo ha dicho Diosdado Cabello (presidente de la Asamblea Nacional), Chávez era un ‘muro de contención’”.

Durante las campañas electorales, Maduro continuó con la línea crítica hacia la oposición, personificada en Capriles, a la que calificó constantemente como “fascista”, “oligarca” y “burguesa”.

“Chávez siempre metía a todo el que no estuviera con él en el saco terrible de la burguesía, siempre con un tono muy descalificativo.

“¿Cómo tú vas a llamar oligarca, burgués al 49 por ciento de un país?”, dijo Marco Bell en referencia al resultado electoral.

“Si en Venezuela hubiesen ocho millones de oligarcas, imagínate, esto sería un paraíso.

“Me parece terrible juzgar de fascista al que no esté contigo. Fascismo es que en la Asamblea Nacional a los diputados de la oposición no se les deje hablar, que controlen los poderes públicos. Eso es fascismo”, comentó.

La crisis del papel de baño

En las últimas semanas, diferentes medios han resaltado la carestía de insumos básicos en el territorio venezolano.

El caso más sonado es muy probablemente el de la escasez de papel higiénico.

“El desabasto es la consecuencia de una política económica poco acertada, es lo que sucede cuando tú tienes en el poder a una persona a la cual no le importa la gente ni el país. Este gobierno dice que es socialista, pero somos unos socialistas con una chequera que va comprando conciencias por todos lados”, respondió el activista.

“Somos unos socialistas bien raros, a los cuales no les importa que el pueblo tenga sus productos básicos, como son la harina, el papel. ¿Por qué? Porque para esta gente lo más importante es la política, más que abastecer”, aseveró.

Sobre las razones de esta crisis consideró que es “una consecuencia del control de precios”, además de las modificaciones al tipo de cambio.

“Si tú tienes una regulación tienes que darles salida a los empresarios para que no vendan a pérdida (…) (lo que están haciendo) es quebrar a la empresa privada para monopolizar la economía. El desabastecimiento es el reflejo de unos gobernantes que no tienen preparación y que les interesa hacer sus negocios”, aseguró Bell.

“Ahí se demuestra que a ellos les conviene que haya un control de cambio y que haya un dólar oficial a 6.30 bolívares (moneda nacional de Venezuela) y uno paralelo a 28. Es absolutamente distorsionado, con el dólar a ese precio, así no se pueden importar insumos de primera necesidad”, agregó.

“Somos un país, gracias a Chávez, que importa un porcentaje altísimo”, comentó.

Venezuela ha tenido un aumento considerable en las importaciones en los últimos dos años.

De acuerdo a datos del Banco Central de Venezuela, hubo un aumento de más de tres mil millones de dólares en el último trimestre de 2012 en este rubro.

El documentalista venezolano acusó al gobierno chavista de emprender una campaña de desprestigio contra la oposición.

“(Tenemos) una política cuyo mensaje es decirle a los estratos bajos que la culpa de su pobreza la tiene la oligarquía”.

No obstante, reconoció los logros de Hugo Chávez, aunque estos tienen todavía muchas deficiencias.

“Este gobierno, si bien, ha masificado la salud, la educación, ha hecho que el alimento llegue a sectores donde antes no llegaba pero lo ha hecho de una forma terriblemente mediocre.

“Hay un debate al respecto porque hay mucha gente que dice: ‘Yo prefiero educación mala que la falta de ella’. Es un punto, pero si ya se está haciendo un esfuerzo, ¿por qué no darle un chance a las mejores personas, educadores, médicos, que vayan al frente del proyecto?”

¿Una revolución rota?

Tal parece que el chavismo se ha quebrantado después de la muerte del comandante. 

El más reciente capítulo de esto es el caso de un audio filtrado donde se escucha la conversación entre Mario Silva, famoso presentador de la televisión estatal, y Aramis Palacios, teniente coronel del G2 cubano.

En la grabación, Silva argumenta que la devaluación se debió a la fuga de divisas de algunas empresas de Diosdado Cabello.

Además, reveló que el presidente de la Asamblea Nacional reiteró que “Maduro no es Chávez”, previo a las elecciones presidenciales, en un claro rompimiento con el actual mandatario venezolano. 

“Y sobre el trasfondo de la elección de Maduro como sucesor de Chávez, Marco Bell ofreció un análisis: “Siempre he dicho que Chávez era un tipo tan egocéntrico que él se rodeaba de puros personajes grises como Nicolás Maduro, que es un tipo que no tiene ningún carisma.

“Porque si nombra a una figura con un poco más de ambición o con más carisma, ahí su liderazgo hubiese estado en peligro”.