El presidente Donald Trump sugirió este miércoles la posibilidad de dar entrenamiento en el manejo de armas de fuego a algunos maestros y permiten que las porten para hacer frente a masacres estudiantiles como la de Florida, en la que 17 personas perdieron la vida.
Trump se reunió en la Casa Blanca con víctimas del tiroteo en la secundaria Marjory Stoneman Douglas. “Eso se llama porte oculto. Así un maestro llevaría una pistola oculta consigo, irían a recibir un entrenamiento especial y estarían allí”, señaló el mandatario.
Mark Barden, cuyo hijo murió en 2012 en la masacre de la escuela primaria Sandy Hook en Connecticut, dijo que los maestros tiene suficientes responsabilidades como para cargar con el deber de tener que usar la fuerza letal para acabar una vida.
La idea de Trump no es nueva, pues la propuesta de armar a los docentes y otros empleados escolares ha sido respaldada em diferentes ocasiones por la Asociación Nacional del Rifle, organización que se opone a cualquier control sobre la posesión de armas.
“Para un maníaco, las zonas libres de armas significan; entremos y ataquemos”, añadió el mandatario.
Andrew Pollack, padre de una adolescente asesinada en Florida, mostró su molestia frente al presidente.
La propuesta de Trump ha sido calificada de insensible, pues se da a unos pocos días de la masacre en Florida.