El huracán María se fortaleció a un ciclón extremadamente peligroso de categoría 5 y golpeó el lunes por la noche a la isla de Dominica en su avance hacia el este del Caribe, y los meteorólogos prevén que se fortalezca todavía más.
El ciclón tenía una trayectoria que podría conducirlo el martes hacia muchas de las islas que fueron destruidas hace unos días por el huracán Irma, para luego continuar con su camino y posiblemente tocar tierra en Puerto Rico el miércoles.
No hubo reportes inmediatos por parte de Dominica luego de que el ojo del huracán tocó tierra, pero algunos techos de zinc comenzaron a volar mientras entraban las bandas externas de la tormenta.
Las autoridades habían cerrado las escuelas y las oficinas de gobierno, y exhortaron a la gente a alejarse de áreas peligrosas y buscar refugio.
En agosto de 2015 la tormenta tropical Erika provocó a su paso inundaciones y deslaves que mataron a 31 personas y destruyeron más de 370 casas en la pequeña y montañosa isla.
En Guadalupe, las autoridades pronosticaron fuertes lluvias e inundaciones, y advirtieron que muchas comunidades quedarán sumergidas antes que culmine la noche.
Con Puerto Rico en la mira del huracán, los funcionarios de la isla advirtieron a los residentes de casas de madera o frágiles que buscaran un refugio seguro.
En Martinica, las autoridades le ordenaron a la población permanecer bajo techo, y señalaron que deberían de estar preparados para apagones y recortes en el suministro de agua. Las escuelas y los servicios públicos no indispensables fueron cerrados.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos informó que María tenía vientos máximos sostenidos de 260 kph (160 mph) la noche del lunes. Se movía en dirección al oeste-noroeste a 15 kph (9 mph).
Se emitieron avisos preventivos para las Islas Vírgenes de Estados Unidos y Británicas, Puerto Rico, Guadalupe, Dominica, San Cristóbal y Nieves, Montserrat y Martinica, así como para Antigua y Barbuda, Saba, San Eustaquio, San Martín, Santa Lucía y Anguila.