El temor se agudiza en el Vaticano ante las crecientes amenazas del Estado Islámico de Iraq y Siria (ISIS) de perpetrar un atentado contra el Papa Francisco.
El corresponsal vaticanista del diario argentino El Clarín reportó ayer que, ante las intensas condenas del Papa contra la persecución de cristianos por parte de ISIS, funcionarios del Vaticano y fieles están preocupados por la seguridad del argentino.
“(ISIS) supera en crueldad a Al Qaeda y, además de hacer prosélitos en Europa, alimenta los temores de un ataque contra el Pontífice que ha unido en la oración a judíos, musulmanes y ortodoxos”, indicó al medio Massimo Franco, experto italiano.
El periódico argentino cita como factor de preocupación que, la semana pasada, el Califa de ISIS, Al Bagdhadi, manifestó “reconquistaremos Roma”.
Además, la revista oficial de ISIS, llamada Dabiq, divulgó en octubre una portada en la que aparece un montaje de la Plaza San Pedro del Vaticano con un obelisco en el que ondea la bandera negra de la agrupación terrorista.
En su artículo principal, titulado “La Cruzada fallida”, Dabiq arremete contra los esfuerzos del Vaticano por terminar la exterminación de católicos en Medio Oriente.
“Conquistaremos su Roma, romperemos sus cruces y esclavizaremos a sus mujeres con el permiso de Alá, el Exaltado”, expresa en la publicación Al-Adnani, vocero de ISIS.
“Cada musulmán debería salir de su casa, encontrar un ‘cruzador’ (cristiano) y matarlo. Y el Estado Islámico insistirá hasta ver su bandera volar sobre Roma”.
A finales de agosto, el diario Il Tempo publicó que fuentes del Servicio Secreto Italiano habían revelado que ISIS tenía en la mira al Papa Francisco, a quien considera “portador de una falsa verdad”.
José Mario Bergoglio también ha afrontado amenazas de la mafia italiana, que está molesta por las reformas que el argentino ha realizado en el Banco del Vaticano.
Francisco sigue firme
Pese a las amenazas, el Pontífice insiste en mantener su política de austeridad.
“Jorge Bergoglio se niega a aceptar vehículos blindados y utiliza al mínimo los helicópteros, obliga además a los encargados de su seguridad a abrir los papamóviles cuando desfila junto a la multitud”, publicó El Clarín.
A los cuestionamientos de un cura amigo sobre la posibilidad de morir en un atentado, el Papa respondió hace unas semanas: “es lo mejor que me podría pasar”.
El Papa viajará el próximo mes a Turquía, un país de mayoría musulmana al que han llegado miles de refugiados cristianos que huyen de ISIS.