La hora de Maduro

El Consejo Nacional Electoral podría resolver hoy si activa el proceso revocatorio en contra del presidente de Venezuela.

De última hora el gobierno de Venezuela pidió al Consejo Nacional Electoral (CNE) que la Mesa de Unidad Democrática (MUD) –coalición de la oposición centro derecha– sea considerada como ilegal en razón de un “fraude en la recolección de firmas necesarias para el referéndum”.

Pero hoy la CNE se pronunciará sobre las firmas que la oposición recabó para solicitar un referéndum sobre la continuidad o no del gobierno de Nicolás, Maduro, el heredero de Hugo Chávez.

Estados Unidos criticó los retrasos innecesarios del referendo revocatorio y urgió al Gobierno a permitir que el proceso salga adelante para reflejar “la voluntad del pueblo venezolano”, declaró el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, John Kirby.

Por su parte, los venezolanos retomaron las calles desde el lunes pasado para marchar y exigir al CNE el cumplimiento de su deber y el apego a los lapsos establecidos en su reglamento para anunciar la recolección del 20 por ciento de las firmas para revocar el mandato de Nicolás Maduro.

“Hemos venido a buscar la cancelación del registro del partido político llamado Mesa de Unidad Democrática por haber participado en el mayor fraude electoral que ha conocido el país”, anunció a la prensa el líder chavista, Jorge Rodríguez. 

El portavoz presentó la solicitud a la Presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, con el argumento de que la MUD había incluido miles de firmas de personas fallecidas, de menores y de detenidos, en su solicitud de referéndum contra el Presidente. 

“Esto presagia, sin duda, un fraude muy grave”, aseguró Rodríguez, señalando que el mismo organismo electoral había detectado el fraude durante el proceso de verificación de firmas.

La coalición

Compuesto por una treintena de partidos políticos distintos, la coalición opositora de la MUD, que controla el parlamento, es el origen del procedimiento para la celebración de un referéndum revocatorio contra el presidente Maduro.

La impugnación del referendo por parte del gobierno de Maduro es un movimiento contra la coalición, y se presentó el mismo día que la MUD esperaba obtener la luz verde al referéndum anti-Maduro. 

Erosión de la izquierda en Sudamérica

El retroceso de las izquierdas se inició el pasado mes de noviembre con la elección de un político de centro-derecha a la cabeza de Argentina, Mauricio Macri, después de 12 años de gobierno peronista bajo la familia Kirchsner. 

Luego continuó en diciembre, en Venezuela, con la aplastante victoria de la oposición al gobierno de Chávez. Y todavía se perpetúa este año a través de una serie de reveses. 

Primero con el impeachment de la Presidenta Dilma Rousseff en Brasil, y con el fallido referéndum lanzado por su colega Evo Morales en Bolivia por el derecho a presentarse a un cuarto mandato, sin olvidar la creciente impopularidad de sus homólogos: Michelle Bachelet en Chile y Rafael Correa en Ecuador.

Este cambio fundamental pone fin a un poder casi hegemónico de la izquierda en Sudamérica 

El caso más sintomático de esto es sin duda el de Venezuela, donde el popular Hugo Chávez dio paso a un Nicolás Maduro mucho más apagado y menos convincente. 

Y los signos de autoritarismo no se hicieron esperar. 

Ahora se nos presenta a un país a la deriva: Venezuela, un país que no tiene derechos. Y en donde oponerse o incluso cuestionar al gobierno es un delito castigado por descalificación. 

Maduro ordenó la detención de dos exaltos oficiales militares que sirvieron junto a Chávez por acusar públicamente al régimen de abandonar la herencia del presidente fallecido. 

Y el actual jefe de Estado está ahora bajo la amenaza de una salida anticipada. 

Las marchas

Desde el lunes pasado, miles de venezolanos marchan en las calles para confirmar su compromiso con un referéndum que revoque a Nicolás Maduro del poder: un paso crucial para la oposición que quiere organizar esta consulta, según lo cual, habría una nuevas elecciones presidenciales.

El líder opositor Henrique Capriles Radonski advirtió que de no haber una respuesta el día de hoy “cualquier cosa puede pasar”. 

Aunque muchos temen que si el referéndum se lleva a cabo, Maduro sería reemplazado automáticamente por su vicepresidente hasta diciembre de 2018. Y esto significa que el poder chavista se mantendría a la cabeza.